Revista Cultura y Ocio
Sombras sin rostros deambulan
bajo el tintineo
de las calles.
Ventanas desafiantes observan lo invisible.
Palabras ignoradas a galope del viento
huyen al paso de la locura.
Cauteloso, el cóncavo universo
declina su prisa.
La historia se torna envejecida
por los ojos que cubren
el rocío nocturno.
Al alba, las paredes de la alcoba
hechizada
por los senderos
de las estrellas
trasluce
la soledad del espejo.