- En el trayecto a la nave espacial "Vostok" (oriente en ruso), a Gagarin le entraon ganas de orinar. Mandó parar el autobús que le llevaba a la cápsula y "descargó" en una rueda. Desde entonces, todos los astronautas rusos en misión espacial han repetido ese "ritual de la suerte".
- La cápsula dónde estaba el astronauta se desprendió del resto de la nave 7.000 km más tarde de lo que debería, pero Gagarin no dijo "ni Pamplona" para no enturbiar el posible éxito de la misión con "minucias técnicas" como que pudiera reventarse contra la tierra
En el contexto de guerra fría existente en los años 50, los soviéticos le ganaron la partida a los americanos, ya que primero pusieron en órbita al Spuknik con la perra Laika en su interior y -para humillación yankie- emitieron los famosos "bit-bit" desde el espacio, para que pudieran ser recogidos por toda la humanidad.
Pero esto de un viaje espacial tripulado... fue demasiado para los americanos y su orgullo patriótico. Por eso quizás no se conoce demasiado la historia, y sin embargo tenemos a Amstrong y sus colegas pisando la luna cada dos por tres en mente.
Así es la historia (supongo)