Dormir a los bebés para que gocen de un sueño reparador y se despierten con energía al día siguiente es algo que todos los padres desean. No obstante, en algunas ocasiones conseguir que un pequeñín se duerma se convierte en una ardua y complicada tarea. Por suerte, los remedios caseros y los ingredientes naturales pueden ser de gran ayuda para calmar a los niños y dormir a los bebés de un modo sencillo, natural y nada perjudicial para la salud. ¡Toma nota!
Ingredientes
Una lechuga
Un vaso de agua mineral
Pasos a seguir
1- Retira unas cuantas hojas de la lechuga y lávalas muy bien para eliminar todos los gérmenes y bacterias.
2- Sumergirlas en agua y vinagre durante una media hora es una de las mejores opciones para limpiarlas en profundidad, ya que el vinagre mata todos los gérmenes de una forma muy natural.
3- Tras haber realizado la limpieza de las hojas de lechuga, pon a calentar el agua mineral.
4- Justo antes de que el agua empiece a hervir, introduce en el interior del recipiente que has empleado para calentarla las hojas de lechuga.
5- Retira el cazo del fuego y tápalo para que el agua se impregne de todas las propiedades de la lechuga.
6- Una vez que el agua se haya enfriado un poco, cuélala y comprueba que el líquido no esté demasiado caliente para no quemar a tu peque.
7- Si la temperatura es óptima, introdúcelo en el biberón de tu bebé y haz que lo consume poco a poco unas horas antes de acostarlo.
8- La lechuga es ideal para dormir a los bebés debido a que posee propiedades sedantes, por lo que le proporciona al organismo un efecto tranquilizante que calma los nervios y combate el insomnio de grandes y pequeños.