[ Vía: Público.es ]
Las madres lactantes duermen tanto, y tan bien, como las mujeres que optan por la lactancia artificial o su combinación con la lactancia materna.
Esta es "una buena noticia para decirles a las mujeres: suspender la lactancia no las ayudará a dormir mejor'. Y los beneficios (del amamantamiento) son enormes para la madre y el bebé", dijo la doctora Hawley Montgomery-Downs, de la West Virginia University.
La lactancia materna protege de varias enfermedades pediátricas, como el eccema, las infecciones del oído medio y respiratorias bajas, el asma, la diabetes tipo 1 y la muerte súbita del lactante.
Un estudio acaba de estimar que Estados Unidos podría ahorrar 13.000 millones de dólares por año y prevenir 911 muertes anuales, si el 90 por ciento de las nuevas madres optaran por la lactancia exclusiva durante los 6 primeros meses de vida del bebé, como se recomienda. El 70 por ciento de las mujeres de este país optan por la lactancia exclusiva para su bebé y apenas el 33 por ciento de ellas la mantiene durante seis meses, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
En esas bajas tasas de lactancia influirían muchos factores, incluido el temor de las madres cansadas a sentir aún más cansancio. Es un "mito urbano" que las mujeres lactantes duermen poco, lo que hace que muchas duden en darle de mamar a sus hijos. No obstante, es cierto que los bebés digieren la leche materna más rápido que la fórmula, lo que hace que puedan necesitar más alimento a mitad de la noche.
Cuando el equipo de Montgomery-Downs le preguntó a 80 nuevas madres con qué frecuencia se despertaban de noche y cuán descansadas se sentían, además de colocarles sensores para medir cuánto tiempo y con qué calidad dormían, no halló diferencias significativas entre las lactantes, las que usaban fórmula o aquellas que combinaban ambos alimentos.
Estos resultados, publicados en la revista Pediatrics, sugieren que "existiría algún tipo de compensación" en las mujeres lactantes, indicó Montgomery-Downs a Reuters Health.
Por ejemplo, los bebés lactantes se despertarían con más frecuencia (y despertarían a sus padres) para comer, pero la autora sugirió que esa alimentación nocturna afectaría menos a los papás que si bebieran fórmula.
Por otra parte, las mujeres lactantes permanecerían despiertas de noche por intervalos más cortos y con menos actividad, al no tener que preparar el biberón, lo que les facilitaría volver a conciliar el sueño.
Además, las mujeres que optan por la lactancia exclusiva tienen niveles más altos de la hormona prolactina, que facilita el sueño.
Blogalaxia Tags: lactancia materna sueño dormir estudio Pediatrics mitos prolactina Hawley Montgomery Downs"Dormir mejor no es un motivo válido para no optar por la lactancia", concluyó Montgomery-Downs.