Lo hemos reconocido alguna vez con anterioridad, nunca nos atreveríamos a pintar de negro nuestro dormitorio, pero nos encanta ver cómo lo han hecho otros.
Para un impacto más dramático todavía importante usar textiles en negros y grises muy oscuros y lo mismo para el mobiliario y los accesorios.
En este dormitorio tenéis buenos ejemplos, la butaca en madera lacada en negro, las lámparas con pantallas y alguna con pie negro también, la alfombra es estampada y combina un negro jaspeado con rombos en grises, incluso la percha de la que cuelgan el par de pantalones es también negra.
¿Os atreveríais vosotros? por quedar, queda fantásticamente bien, muy elegante y limpio y en el caso de este piso de 47 m² es un gran contraste con el resto de la casa, que se ha mantenido prácticamente todo en blanco excepto algún contraste en arena o canela.
No os perdáis el tour por el resto de este pequeño piso, ¿que look preferís el del dormitorio o el del salón cocina? ¡Feliz jueves!
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