Un peligro del tecno-optimismo es dejarnos llevar por el entusiasmo y, sin rigor, análisis, ni crítica, dar por buena una tecnología simplemente porque está de moda, sin conocer bien sus características, su madurez, su campo de aplicación... o las tecnologías más maduras alternativas.
Dos de los campos más de moda hoy en día son Big Data e Inteligencia Artificial, y dentro del polifacético y politecnológico panorama de ésta última, el procesamiento del lenguaje natural.
Para dejarlo claro: personalmente soy optimista en lo que a la tecnología se refiere, creo que históricamente nos ha aportado muchísimo y que aún tiene más que aportar en el futuro. Y los dos campos mencionados son de los que me resultan más atractivos.
Sin embargo, también amo el rigor y el realismo, así que, sin decir que esté en lo cierto ni lo contrario, me parece interesante traer a colación dos advertencias que Field Cady hace en su libro 'The Data Science Handbook'. La primera es relativa a Big Data, respecto al la cual nos dice:
Big Data tools are almost always slower, harder to setup, and more finicky than their traditional counterparts.
La segunda es a propósito del procesamiento de lenguaje natural
NLP processing is generally very computationally inefficient.
Ni afirmo ni desmiento que Field Cady esté en lo cierto, aunque a buen seguro tiene razones para hacer estas afirmaciones.
Lo que sí es importante, es que nos puede abrir los ojos, nos puede recordar que 'no es oro todo lo que reluce' y, sobre todo, nos puede servir de acicate para tener siempre muy presente que, por brillante y atractiva que sea una tecnología, lo primero de todo es siempre el rigor y la responsabilidad en su aplicación.