¿Quieres aumentar rápidamente su productividad, creatividad y eficacia?
Entonces, un consejo sencillo que puedes utilizar es mover el ratón y colocarlo en el lado izquierdo.
¿Cómo es posible? Para empezar, le obliga a utilizar una parte diferente de su cerebro, concretamente el hemisferio derecho, que controla el movimiento de su lado izquierdo.
Con el tiempo, esto puede ayudar a fomentar la destreza de las manos, lo que a su vez puede aportar muchos beneficios positivos a su cerebro al mejorar su conciencia espacial, su memoria y posiblemente incluso su creatividad (puede mejorar la comunicación entre los dos hemisferios del cerebro, lo que ha demostrado ser útil en muchos estudios).
A medida que creas más organización neuronal para aprender esta destreza con la mano izquierda (por supuesto, si fueras zurdo, ¡la pondrías en la derecha!
Tu cerebro se vuelve más hábil para adaptarse y cambiar, por lo que es más fácil aprender otras tareas de habilidades nuevas.
Al mismo tiempo, poner el ratón en el lado izquierdo puede hacer más molesto su uso.
Esto es algo malo si estás enviando correos electrónicos de trabajo o realizando otras tareas importantes que requieren el ratón, pero en otros casos puede ser realmente algo bueno.
Esto se debe a que controlar el ratón con la mano izquierda puede ser suficiente para evitar que deambule por la web o navegue por YouTube, lo que a su vez significa que es probable que esté más concentrado en el trabajo que está haciendo y lo haga más rápido.
Mantén el ratón en el lado izquierdo para obtener todos estos beneficios.
¿Qué más puedes hacer fácilmente que tenga un profundo impacto en tu capacidad para trabajar de forma eficiente?
Levántate
Al igual que utilizar la mano izquierda puede potenciar tu creatividad y la memoria, estar de pie puede mejorar tu concentración y ayudarte a ser productivo durante más tiempo.
Esto se debe a que estar de pie ayuda a que el corazón trabaje más, lo que aumenta el suministro de oxígeno y nutrientes en el cuerpo y en el cerebro.
Al mismo tiempo, ponerse de pie en el trabajo puede tener efectos beneficiosos distintos de la productividad: por ejemplo, puede ayudar a quemar más calorías y a mejorar la postura y eliminar muchos de los problemas de espalda asociados al trabajo en un escritorio o una silla.
Sin embargo, los estudios han demostrado que sentarse favorece la concentración cuando se trabaja en tareas difíciles, por lo que la mejor manera de trabajar es estar de pie y responder a los correos electrónicos, y luego sentarse cuando se quiera enterrar la cabeza en la arena.
Ah, y resulta que hacer más ejercicio también puede mejorar la memoria y la concentración en el trabajo en general.