Publicado el 20 septiembre, 2013 | por Virginia Lancha
Hay que ser cuidadoso a la hora de elegir tema intrascendente en la cola del supermercado, porque ya ni el anticiclón de las Azores se salva de la controversia.
Y si no que se lo pregunten a los vecinos de la pequeña localidad de Rostovon, situada en el sur de Rusia, donde dos clientes que acudieron a comprar cerveza al supermercado, terminaron a puñetazos y tiros tras una acalorada discusión sobre el filósofo prusiano Immanuel Kant.
Lo curioso de la discusión es que ambos se declaraban fervientes defensores de las teorías del filósofo, al que se entiende como punto de partida de la filosofía contemporánea, por lo que llegados a este punto una no sabe donde habrían llegado si hubieran defendido posiciones encontradas.
Tras la refriega, el herido fue trasladado al hospital con heridas leves y el agresor huyó de la escena, siendo detenido posteriormente por la policía que abrió diligencias por las que el detenido se enfrenta a una pena de 15 años de cárcel.
Igual es asunto de rusos que beben cerveza esto de discutir por la “Crítica de la razón pura” (para que luego digan de lo mesurado de lo intelectual). Porque no se considera noticia, seguro que por habitual, la salida del bar a mamporros de dos parroquianos por la titularidad de la portería del Real Madrid en estos tiempos difíciles para San Iker, patrón de La Roja.
Igual es cuestión de los planes de estudios que las discusiones elijan temáticas de mayor o menor calado, aunque mucho me temo que el grado del enfrentamiento venga determinado por la graduación alcohólica en ambos casos.
Al final la culpa será de Kant, que siempre fue provocando.
Visto en: RT.