Llegando ya el descanso a la recta final; y abandonado el calor de otra latitud a la que llegué merced a uno de estos puentes festivos que igual se vuelven polvo cualquier día de éstos, recupero por fin el teclado de mi casa para escribir una brevísima nota.Tienen que aparecer en este blog dos referencias al trabajo recogido en otros tres espacios que se han hecho eco de parte de la actualidad masónica del fin de semana. Y enuncio la cuestión casi en términos de obligatoriedad por la importancia de la información transmitida. De una parte, en "Apuntes desde el Rito Francés", se nos ha contado algo sorprendente, novedoso: El G.O.D.F. ha asumido íntegro el comunicado de los talleres que trabajan en España y éste se ha hecho circular, fechándolo en París el 29 de octubre de 2011. Dejo aquí el apunte para la particular historia de Memoria Masónica, y tomo prestado el texto de este espacio amigo.
Por otro lado, El Masón Aprendiz y Mandiles Azules nos cuentan algo que concierne al Gran Capítulo General de España, la estructura que, con Patente otorgada por quien únicamente puede darla, articula el trabajo de los Órdenes de Sabiduría del Rito francés. Me estoy refiriendo evidentemente a la aparición del segundo Capítulo español (el primero vio la luz a comienzos de este año en Barcelona -La Rosa de Foc-), que desarrollará su actividad en Andalucía bajo el título distintivo de "República".
Son dos noticias. Dos noticias creo que buenas pero que tienen dos dimensiones muy diferentes. Sin pretender hacer una mezcolanza de cosas dispares, en ambos supuestos uno ha de poner la esperanza en que el trabajo bien hecho, el sano empeño, se vean compensados con algo. Evidentemente con el logro de la paz en el primer caso. Y en el segundo, con el tranquilo asentamiento del Rito francés en toda su dimensión entre nosotros, sin estridencias de ningún tipo, como bien dice Manel Mor. Et si omnes, ego non.