Este informe trata de demostrar que la aplicación de técnicas de gamificación ( en esta píldora que he creado en etceter se puede aprender más sobre el tema) produce grandes beneficios en el aprendizaje. Se trata de aplicar las mecánicas de juego a cualquier tipo de proceso con el objeto de hacerlo divertido y atractivo para los usuarios.
Según el artículo del Confidencial " La clave de aplicaciones como DragonBox es que sustituyen un proceso arduo, con predisposición a frustrar al estudiante, por otro divertido, que reta al usuario a seguir avanzando, desbloquear nuevas pantallas, sin que se dé cuenta de que está sumergiéndose en las procelosas aguas del pensamiento abstracto. Porque DragonBox tiene una base 100% matemática y está orientada a la enseñanza, con un manual para que el personal docente lo aplique de la forma más adecuada. Según su creador, el francés Jean-Baptiste Huynh, 8 de cada 10 niños menores de 15 podrá resolver sin mayor complicación la ecuación inferior con solo dedicarle 4 horas al juego".
Otra interesante reflexión del artículo es la siguiente: "No es descabellado plantear un escenario futuro en el que los niños comiencen a estudiar álgebra o lógica nada más salir del jardín de infancia. "Debemos crear herramientas para que los niños puedan usarlas en cuanto estén preparados, y eso debe ser a una edad muy temprana", dice Huynh a Forbes, "estamos muy centrados en la enseñanza y muy poco en el aprendizaje, cuando son dos mundos distintos. Los profesores enseñan y los alumnos aprenden. Tratar de enseñar las cosas a mi manera, como venimos haciendo, no funciona. Sin embargo invitar a los niños a aprender cuando están motivados es extremadamente eficaz".
DragonBox está disponible
tanto para Android como para los sistemas móviles de Apple. La versión para niños entre 5 y 12 años cuesta 4,79 euros, y 8,99 su edición avanzada, para jóvenes de 12 años en adelante