El aroma de leña fresca
es de las últimas cosas que olvidarás
cuando se cierren tus párpados para siempre.
El olor de leña fresca, blanca
en el tiempo de la salvia en primavera:
Es como si la Vida misma pasease
descalza
con rocío en el pelo.
El extraño y desnudo olor
hace una rubia femenina genuflexión
en silencio dentro de tí,
tañe la flauta del sauce
por todos tus huesos.
Con hielo bajo la lengua
buscas el fuego para
una palabra.
Y tú sabes, suave como
el viento del sur a través de la mente
que todavía existen cosas
en el mundo en que confiar.