Este año endulzaremos un poco el día de San Valentín con un ramo de rosas comestible.
- lenguas de gominola rojas
- lenguas de gominola verdes
- ositos de gominola
- palillos largos
- un vaso
- goma eva verde
- goma eva amarilla
- goma eva blanca
Para hacer las flores basta con enrollarlas sobre sí mismas y pincharlas en el palillo que nos hará de tallo. Para darle color pondremos debajo, a modo de hoja, trozos de lenguas verdes y para que todo ello aguante y no se deslice hacia abajo es aconsejable finalizar con un osito (o golosina similar, no demasiado blanda) cada una de las rosas. Así hasta crear un ramo.
Aquí os dejo un link para que podáis ver el modo de enrollado de las gominolas, porque aunque parezca fácil tiene su truquillo.
Para hacer el tiesto donde presentaremos el ramo, decoraremos un vaso de cristal con goma eva y lo rellenaremos con ositos de colores o chucherías variadas.
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