Dylan vuelve a los Grammy

Dylan cantará en los Grammy por quinta vez. Leído en Efe Eme:
"La ceremonia de los Grammy de 2011, que tendrá lugar el próximo domingo, 13 de febrero, contará con la participación de Bob Dylan, que se unirá a los nominados Mumford & Sons y los Avett Brothers.
Según explica el productor de los Grammy Ken Ehrlich, los británicos Mumford and Sons interpretarán ‘The cave’, a continuación los Avett Brothers tocarán ‘Head full of doubt, road full of promise’. Finalmente Bob Dylan saldrá al escenario para interpretar, acompañado de una guitarra acústica, una canción todavía por determinar, que “está sujeta a la aprobación de cierta persona”, asegura Ehrlich.
“No creo que ninguna de estas bandas estaría sobre un escenario si no fuera por Bob Dylan”, añade Ehrlich. “Cuando uno ve a ese nombre y piensa sobre lo que representa, esas son las cosas que queremos que formen parte del espectáculo”.
Dylan ya ha participado en otras cuatro ocasiones en la ceremonia de los Grammy. La primera tuvo lugar en 1980, cuando las primeras notas de ‘Gotta serve somebody’ fueron recibidas con una gran ovación por parte del público. En 1998, mientras interpretaba ‘Love sick’, el músico y actor Michael Portnoy subió al escenario y se quitó la camisa, mostrando que en el pecho llevaba escrito “Soy bomb”. Dylan siguió tocando indiferente a lo que ocurría a su alrededor mientras los miembros de seguridad se llevaban a Portnoy.
La 53 edición de los Grammy Awards además contará con la participación de Justin Bieber, Drake y Katy Perry, entre otros. Barbra Streisand cantará uno de sus éxitos de los setenta, mientras que Mick Jagger participará en un homenaje a Solomon Burke".
Posdata: Dylan emprenderá de nuevo en abril su gira interminable, con una serie de conciertos, algunos de ellos pendientes, en Asia y Oceanía. Y propagan el rumor de una tourné europea en verano. Al tiempo, informan de la probable publicación de Renaldo & Clara, la peli de Dylan del 78, en formato deuvedé. A Dylan se le fue la olla del arte y ensayo y facturó cuatro horas al más puro estilo críptico y surrealista. Glorioso fracaso total. Por entonces, el artista comenzaba a desarreglar su repertorio, por así decirlo, a mirar su cancionero desde otra distancia.