Pongamos que un día alguien llama a tu puerta. Un hombre normal y corriente,vestido con tejanos y una camisa de cuadros, de unos 40 años. Abres ydesconfías, como cada vez que un desconocido llama.
El hombre dice que un amigo le ha comentado que igual te interesa venderleun bolígrafo, te ofrece 20 euros. Tú, desconcertado, en un primer momento creesque se trata de un lunático, pero pronto te das cuenta de que lo dice en serio.Te enseña el dinero.
Cierras la puerta, vas a busca de un boli, se lo das y tesientes realmente afortunado, has ganado 20 euros por algo que te costó en sudía menos de 1 euro.
Dos días después de nuevo llama a tu puerta un desconocido. Se trata de unhombre trajeado, nada más mirar por la mirilla te das cuenta de que es uno deesos típicos vendedores comerciales falsos y lameculos. Abres por cortesía.
Tras un saludo no tarda en abrir su maletín para mostrarte su mercancía. Tesorprendes al ver que viene vendiendo bolígrafos, "a 30 euros unidad, nolos encontrará más baratos y nunca bajarán de este precio". Te ofendes,sintiendo que te tratan de idiota. Y lo despachas de un portazo.
Esa misma tarde en el trabajo, un compañero te comenta cómo están subiendolos precios de los bolígrafos. Tú que no sabías mucho de la situación siguescon la mente en aquel comercial.
Al salir del trabajo vas a una papelería y casi se salen los ojos de tusórbitas al ver que los bolígrafos más baratos valen cerca de 40 euros.
Llegas a casa cabreado contigo mismo y confundido. Deseando haber compradoaquel bolígrafo por 30 euros.
Pasan los días, las semanas, te sorprendes al ver cómo están subiendo losprecios de los bolígrafos. Acabaste vendiendo todos los bolígrafos que teníaspor unos 50 euros la unidad pero hoy en día ya no hay ninguno que valga menosde 100.
Un buen día llama a tu puerta de nuevo, aquel comercial trajeado, se te hacela boca agua al ver tantos bolígrafos y te dice: "a 60 euros la unidad, nolos encontrará más baratos, nunca bajarán de este precio".
Casi ni te lo piensas, no necesitas bolígrafos pero sabes que podías fácilmentevenderlos por el doble de ese precio. Además, al ritmo que están subiendo losprecios, si los guardas unas semanas podrás venderlos incluso por el triple. Asíque decides comprar una docena. 720 euros, sabes que son bien invertidos. Elhombre trajeado se va satisfecho, ambos quedáis contentos por vuestro negocio.
Esperas unas semanas y cuando vas a vender los bolígrafos nadie te ofrecemás de 10 euros.
Multiplica los euros por 10000, cambia los bolígrafos por pisos, elcomercial por una inmobiliaria, los meses por años y los días por meses. ¿tesuena?