GRAN GUÍA TEMPLOS ROMÁNICOS
" Lligordá el pueblo nuestro,
os honra en eje altar.
Es la gente devota vuestro,
que con amor os lo alzó,
siempre les haga beneficio,
pues, Pedro, sois Vos su patrón".
Aquel diciembre de 2011 fue gozoso. Transitábamos la carretera desde Besalú a Beuda cuando decidimos detenernos en el pueblo de la Garrotxa gironense de Lligordá.
Lligordá se denominaba Longordani en 1079, Longorzano en 1106, Longordano en 1175, Lugurciano en 1178, Ligurciano en 1231 y Lligordiano en 1362. ¡ Cosas de los catalanes!
Su templo románico del siglo XII aparece documentado en 1079 cuando en vizconde de Bas y su esposa Ermessenda (precioso nombre, por cierto), lo ceden al monasterio de Sant Joan les Fonts para que fundaran un monasterio bajo la Regla benedictina que favoreciera el asentamiento de la población.
De nave rectangular, termina recogida en ábside semicircular sin decoración alguna. Bóveda de cañón apuntada.
Al oeste, campanario del siglo XVIII que sustituyó a la espadaña original
y que hoy es accesible por escalera exterior adosada al muro.
Puerta al sur con tres arcos en degradación que contiene tímpano con cruz en relieve.
Cerrojo que impide la entrada. Realizado en forja románica y acaba en serpiente.