Hace por estos días catorce años que llevé a mi mascota a conocer este pueblo ribagorzano que ya aparecía documentado en 1044 cuando Ramiro I cedió a su esposa Elia, hijos y nietos "in villa Luzares". La plaza se encontraba en plenas obras de remodelación y, en principio, nos temimos lo peor.
Rodeamos el edificio contemplando su planta de tres naves con sus correspondientes ábsides semicilíndricos, con ligera desviación para salvar el ligero desnivel, trabajados en sillería regular.
Tejados de losa a dos aguas refugian canecillos de no muy buena factura.
En la parte oriental, una curiosa puerta de arco de medio punto que presenta un tímpano extraño: en la parte superior izquierda una letra griega dentro de un triángulo; en la inferior izquierda un lazo entre círculos y una mano. En la superior derecha otra letra griega y la inscripción MAR sobre un motivo serpentiforme, y en la faja lisa del lateral, la palabra PETRUS.
Tras pesquisas necesarias de puerta en puerta, obtuvieron la llave de la entrada principal,
que no es románica sino del siglo XVI y que está adornada con dovelas como si correspondiese a obra civil.
Sobre la portada un óculo y a la izquierda una ventana adintelada.
Torre de planta cuadrada a los pies de la nave norte. Es cuadrada en los dos cuerpos abajo y octogonal en los dos superiores. Aloja un esbelto campanario del siglo XVI.
Accedimos al interior del templo románico del siglo XII consagrado a San Cristóbal.
Tres naves cubiertas con bóveda de cañón que asientan en arcos fajones y se separan por medio de formeros.
Capiteles vegetales y animalísticos, sin figura humana alguna
Junto a la capilla gótica a los pies, se encuentra la escalera de acceso al campanario
desde donde disfrutar de preciosas panorámicas y el Castillo Sancho Ramírez concediera a Arnau Mir por su colaboración en la reconquista de la zona. Setenta metros de longitud y treinta de anchura por veinticinco de alto, es torre-recinto, la torre carece de aperturas y solo aspilleras, pero la parte alta dispone de ventanas estratégicamente dispuestas para defender los flancos más débiles. Se estructura en seis pisos: abajo, almacén, segundo habitación y los altos para funciones de defensa, provisto de retrete y capilla.