‘Edge of Spider-Verse’ #4, terror bien fundamentado

Edge of Spider-Verse ha resultado ser más interesante de lo que pensaba. Sin desentonar en el buen accionar de las historias previas, el número cuatro prolonga esa buena racha y explora otro sitio que rara vez se atreven a tocar en series regulares. Envuelto en el género de terror/Sci-Fi, lleva al personaje a zonas extremas que tienen que ver más con lo grotesco que el heroísmo.
Clay McLeod Chapman encargado de escribir el argumento desquicia la historia y presenta a un protagonista, Patton Parnel, a un grado de la locura. Extrayendo ideas y conceptos fieles del género, el escritor acierta en la personalidad de Parnel y lo convierte en un antihéroe lleno de rencores y con uno que otro tornillo flojo.
El cambio de ideas con respecto al bueno del tío Ben se agudizan y complementan de buena manera la historia. Referencias a Mary Jane o Flash dejan en claro que se sigue tratando de una historia de Spider-Man, no obstante terminan por fastidiar tomando en cuenta la ridiculez de los nombres:¿Sara Jane? ¡Por favor!
El final va bien conducido hacia Spider-Verse y mantiene la vertical en torno a su propósito. Chapman se las arregla para ir distorsionando cada vez más el mito de Spider-Man tirando de todo lo que tiene y haciendo del final una locura sobrecargada de terror. La evolución de los personajes y del propio protagonista me parecen perfectos, ingeniosos y salvajes. Se siente la presencia de la narrativa y el ambiente lúgubre digno de una historia terrorífica.
En los lápices Elia Bonetti lleva las cosas de una manera correcta; tiene idea de lo que su escritor quiere contar y le ayuda en momentos clave, como las ultimas páginas o momentos donde no hay que poner tanta imaginación para descifrar el enigma de las circunstancias. Sin ser espectacular, su trabajo es estable, Si se siente débil por momentos y hasta podríamos decir, falta más astucia y finura.
Edge of Spider-Verse 4 asusta, dejando la sensación de tener un insecto en la nuca al acabar de leerlo. Clay McLeod Chapman tiene buena mano y desarrolla un personaje interesante en poco tiempo. No obstante sigo teniendo esa sensación de vacío y percibo una carencia de un mejor remate. Entretiene, asusta y ofrece lo que se pide: originalidad.