La semana pasada estuve hablando con Hocine Zeghichi, maquillador internacional de Givenchy, que vino para la presentación de las nuevas ediciones limitadas de las máscaras Noir Couture y las sombras Ombre Couture, que se visten como las principales capitales de la moda: Nueva York, Paris y Tokio.
Como les mostré en Instagram, estas ediciones especiales tienen una presentación diferente, la Noir Couture Volume está vestida de Paris, con líneas doradas en su packaging. La acompaña la sombra en crema Ombre Couture bronce. Para Noir Couture Nueva York, el plateado y las líneas y estrellas de la bandera de Estados Unidos. Para Noir Couture Waterproof Japón, un delicado diseño de la flor de cerezo y la sombra es dorada. Pueden ver las reseñas de las máscaras haciendo click en los links.
Según Hocine, los colores de las sombras están inspirados en las mujeres de esas ciudades. Mientras que las parisinas aman ir más allá con los colores y jugar, las neoyorquinas quieren brillos y las japonesas subliman el color de su piel.
Más allá de esas personalidades, los 3 colores son muy clásicos y aptos para ser usados en todo momento. Pueden combinarse o usarse solos. En el envase se notan muy intensas, pero sobre la piel, se esfuman muy fácilmente.
El truco que me dio Hocine es jugar con la intensidad según la aplicación: para lograr un velo sobre la piel, se aplica con los dedos. Para un color más intenso, la aplicación se hace mediante golpeteos con brocha o dedo. También puede usarse como delineador con pincel fino.
Al preguntarle si pueden ser usadas como iluminador, me dijo que si bien a él no le gustaba mucho la idea del strobbing, las sombras podrían usarse en el pómulo, pero hay que esfumarlas muy bien.
Pueden ver cómo queda la Ombre Couture Nueva York (plateada) sobre la piel, sin primer ni otro producto. Es muy fácil para trabajar, se esfuma muy bien y no se amontona en los pliegues del párpado. Para conseguir mayor duración y que no se corra, lo mejor es colocar una sombra en polvo arriba, pero puedo dar fe que aguanta horas intacta.
Aporta un acabado fresco y natural, con unos micro brillos que destellan mucho. (después de esta foto, me quedé dormida -y maquillada, horror- y desperté con brillos en los pómulos que me hicieron sentir una vedette de la calle Corrientes.
Para quienes no se animan a los colores más intensos, Hocine probó en mis ojos la versión Paris. La aplicó mediante golpeteos en la esquina externa del párpado superior y esfumó hacia las cejas y el lagrimal con una brocha. Delineó con un lápiz azul oscuro para aportar luminosidad. Usó el tono más oscuro, pero también hay un azul jean que hubiera quedado bien.
En el lagrimal parece que aplicó un poco de dorado, pero no, es la misma sombra esfumada. Pido perdón por la calidad de las fotos, que fueron tomadas con el celular.
El maquillaje duró intacto desde el mediodía hasta las 10 de la noche. No se cuarteó ni se amontonó en los pliegues del párpado y siempre mantuvo el color.
Estas 6 opciones son ediciones limitadas. Se consiguen en los puntos de venta. Las sombras tienen un precio de $530 y las máscaras, $730.
Yo volveré por la Ombre Couture Paris, la bronce.
¿qué les parece?