Eduardo Mendoza.
El premio mejor dotado en lengua castellana se lo ha quedado Eduardo mendoza, con una novela que trata el ya recurrente tema de la guerra civil española (tan repetido el tema como el sicariato en Colombia). El libro se llama Riña de gatos. Así lo publica el diario Heraldo:
El escritor barcelonés Eduardo Mendoza, oculto tras el seudónimo Ricardo Medina, ha ganado la 59 edición del Premio Planeta de novela, dotado con 601.000 euros, con la obra 'Riña de gatos. Madrid 1936', un libro que ha definido como "novela de intriga, pero también de reflexión".
El punto de partida de la novela ganadora, presentada bajo el título seudónimo 'La muerte de Acteón', es la llegada a la España de la primavera de 1936 de un joven inglés, especialista en pintura española, reclamado para tasar un posible cuadro desconocido de Velázquez. En la misma velada literaria en la que se ha otorgado el primer premio, el jurado, integrado por Alberto Blecua, Ángeles Caso, Juan Eslava Galán, Pere Gimferrer, Carmen Posadas, Rosa Regàs y Carlos Pujol ha seleccionado como finalista la novela 'El tiempo mientras tanto', de la periodista y escritora valenciana Carmen Amoraga.
Nada más conocerse el fallo, Eduardo Mendoza ha comentado que le costaba hablar de su novela, porque "siempre escribo libros para ver cómo acaban y no sé muy bien lo qué pasa" y en esta ocasión el autor barcelonés piensa que se trata de "una novela de intriga", un argumento de peso para no avanzar gran cosa sobre su trama.
Según el autor de 'La verdad sobre el caso Savolta', la novela ganadora es de "misterio, pero también de reflexión sobre un momento histórico". 'Riña de gatos' sucede en el Madrid de 1936 previamente a la Guerra Civil, cuando "todo el país está en plena expectativa, y hay conjuras y misterios".
En ese marco coinciden "un personaje histórico real y otro de ficción", que se ven envueltos en "intrigas, aventuras, amores y tiros".
Mendoza ha confesado que ha escrito "una novela de las que me gusta leer y de las que me gusta escribir", con "una trama de ficción en un marco rigurosamente cierto", que transcurre en un par de semanas decisivas, pero todavía inmóviles de la historia de España, "en las que se está fraguando algo que nadie sabe lo que va a pasar, como se decía antes, en las que se masca la tragedia".
Uno de los protagonistas de 'Riña de gatos' es "un inglés despistado" que desembarca en Madrid para resolver un asunto y allí se encuentra a "un personaje fundamental para la historia de España", del que lo único que ha querido revelar es que es "un personaje muy mentado, pero poco estudiado". Son los lectores, advierte Mendoza, los que deberán ir adivinando la identidad de ese personaje misterioso.
Considera el escritor que a lo largo del tiempo no ha cambiado mucho como escritor: "Creo que soy el mismo, aunque he intentado avanzar en cada novela y he procurado no repetirme nunca".
Además de abordar los géneros del misterio y de la aventura, por estar situada en un momento histórico crucial, se puede decir, admite, que "también es una novela política", si bien se ha esforzado en no presentar la historia de una forma maniquea.
Cree Mendoza que a pesar de sus esfuerzos por plantear una novela seria, ha sido inevitable incluir un componente de humor, algo que va con su genética: "creo que incluso en las circunstancias más trágicas pueden haber elementos divertidos".
Como paradigma de los escritores que convirtieron con su obra a Barcelona en una personaje literario más, en esta ocasión Mendoza viaja con la novela ganadora del Planeta a Madrid: "La idea surgió cuando me interesé por ese momento de la historia, en el que todo lo que se estaba cociendo sucedía en Madrid, y finalmente lo vi como una oportunidad para cambiar de escenario y para abordar una ciudad que también conozco y también me gusta".
Mendoza ha revelado que se ha presentado a este premio "para saldar una deuda con una persona que no está presente", en referencia al viejo editor José Manuel Lara Hernández, quien ya le insistió que se presentara al Planeta después de publicar 'La verdad sobre el caso Savolta', su primera novela.
Fue "muy importante" para el joven Mendoza la insistencia del veterano editor, quien volvió a plantear la misma propuesta años después con la misma respuesta: "No tengo nada preparado". "Al final de su vida -ha agregado- me volvió a llamar y le dije que no tenía nada; a lo que él me espetó: 'lo que no tienes es lo que has de tener para presentarte al premio Planeta', por eso este premio, aunque tarde, va por usted".