Norelys Morales Aguilera.─ Las declaraciones de Donald Trump en enero durante una entrevista exclusiva con ABC News, sobre las torturas en la que aseguró “Creo absolutamente que funcionan”, han repercutido en la ONU, mediante Ben Emmerson, relator especial de la ONU para los Derechos Humanos y la Lucha contra el Terrorismo, que abordó el tema en rueda de prensa en Ginebra (Suiza), este 3 de marzo de 2017.
Según Trump, sus jefes de inteligencia consideran que técnicas
como el “ahogamiento simulado” pueden dar resultados en la lucha contra
el terrorismo extremista. Durante la campaña presidencial el magnate a la cabeza del régimen imperial no pudo ser más explícito: “¿Qué si apoyo el ahogamiento simulado? Te puedes apostar el culo a que sí”, llegó a decir.
El “ahogamiento simulado”, la privación de sueño, el uso de perros agresivos, los gritos, los golpes o la humillación fueron algunas de las técnicas de “interrogatorios forzados” instauradas tras los atentados terrorista del 11 de septiembre de 2001 contra EE.UU. por el Gobierno del presidente George W. Bush. [1]
La argumentación del relator fue clara y sin ambiguedades, según la agencia AP, dijo el viernes 3 que al escuchar a Trump "elogiar las virtudes de la tortura como arma en la lucha contra el terrorismo'' y confirmar su disposición a autorizar su uso le "heló la sangre''.
Criticó que un presidente estadounidense ponga en práctica, por razones de “populismo jingoísta”, un “mayor acto de ilegalidad”, que utilizaba la Administración del exmandatario estadounidense George W. Bush, como un instrumento en la lucha contra el terrorismo.
Asimismo, en otra parte de sus declaraciones, se refirió al programa secreto de cárceles, de detención y de rendición ejecutado por la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, por sus siglas en inglés) durante el mandato de George W. Bush, y lamentó que ningún responsable de las torturas aplicadas fuera llevado ante la justicia, pese a que su identidad “era conocida”. [2]
Emmerson aseveró que Trump ha sido el primer jefe de Estado elegido democráticamente para defender la tortura. Agregó que altos funcionarios del Gobierno de George W. Bush, expresidente de EE.UU., deberían ser procesados por permitir la tortura.
También señaló que la cancelación de la orden ejecutiva del expresidente Barack Obama para cerrar la cárcel de Guantánamo en Cuba sería un ‘paso grave y retrógrado’.
Y, como que esa oprobiosa cárcel está en territorio cubano, las acusaciones a la Isla por violaciones de derechos humanos, como recoge el último informe del Departamento de Estado [3], hay que verlas a partir de este punto.
Notas
[1] http://www.elnuevodiario.com.ni/internacionales/377608-trump-dice-que-restableceria-tortura-ahogamiento-s
[2] http://www.hispantv.com/noticias/ee-uu-/334864/onu-advierte-apoyo-trump-torturas
[3] http://www.state.gov/j/drl/rls/hrrpt/humanrightsreport/index.htm?year=2016&dlid=265578