Los demócratas del Congreso de los Estados Unidos presentaron el jueves una legislación para expandir la Corte Suprema de nueve jueces a 13. Los legisladores argumentan que al hacerlo se “restablecería la integridad de la corte y revertiría los errores perpetrados por [Mitch] McConnell y Trump”, líderes republicanos. Esto debido a que sus tres nominados cimentaron una mayoría conservadora, potencialmente durante generaciones.
Lea también:
Reguladores en EEUU piden “pausar” vacunación con J&J tras detectar “coágulos raros”Biden: todos los estadounidenses serán elegibles para la vacuna a partir del 19 de abril“La corte está rota, y no se equivoquen al respecto. La corte está rota porque el senador Mitch McConnell, sus colegas republicanos en el Senado y Donald Trump la rompieron”, dijo el senador Ed Markey, demócrata de Massachusetts, al presentar la Ley del Poder Judicial de 2021.
Él criticó a McConnell por negarse a considerar al entonces juez Merrick Garland para reemplazar al difunto juez Antonin Scalia meses antes de las elecciones de 2016. Pero instalaría con éxito a la juez conservadora Amy Coney Barrett pocos días antes del día de las elecciones en 2020 tras la muerte del icono liberal, la juez Ruth Bader Ginsberg.
“No puede haber ninguna justificación para lo que hicieron. ¿Cómo pueden los estadounidenses mirar a la Corte y esperar que haga justicia. Que haga justicia igualitaria, cuando ha sido tan severamente manipulada políticamente?” preguntó el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jerrold Nadler, uno de los patrocinadores del proyecto de ley.
Nadler agregó: “Algunas personas dirán que estamos empacando la Corte. No empacamos. Estamos desempacando lo que el Senador McConnell y los republicanos empacaron el último par de años.”
“Un loco proyecto de ley”
Markey, junto a sus compañeros demócratas en los escalones de la Corte Suprema, argumentó que el Congreso “debe expandir la corte y debemos abolir el obstruccionismo para hacerlo”. Sin embargo, los propios demócratas carecen del apoyo de su propio partido para esa medida.
Por su parte, los republicanos criticaron la propuesta incluso antes de que fuera revelada. McConnell dijo que incluso la amenaza de una legislación, a pesar de que tiene poca o ninguna posibilidad de ser aprobada, es una parte clave del plan de los demócratas.
“No se trata sólo de si este loco proyecto de ley se convierte en ley. Parte del punto aquí son las amenazas mismas. La izquierda quiere una espada colgando sobre los jueces cuando sopesan los hechos en todos los casos”, argumentó McConnell.
“Las amenazas son el punto. La toma de rehenes es el punto, y las personas responsables de todo el espectro político tienen el deber de denunciar esto”, dijo McConnell, republicano por Ky., En un discurso en el Senado.
El senador Lindsey Graham, RS.C., lo llamó una “idea terrible”.
Proyecto con oposición incluso dentro de los demócratas
Pero el impulso liberal enfrenta fuertes dificultades con la oposición de alto nivel proveniente de su propio partido y del ala liberal de la corte.
Aunque la legislación permitiría al presidente Joe Biden nombrar a cuatro jueces presuntamente liberales, el entonces candidato Biden le dijo al copresentador de “Good Morning America”, George Stephanopoulos en octubre que “no era un fanático” de la expansión de la Corte Suprema.
“Lo último que tenemos que hacer es convertir a la Corte Suprema en un simple fútbol político, quien tenga la mayor cantidad de votos obtiene lo que quiera”, dijo Biden a CBS News en el programa “60 Minutes” en octubre. “Los presidentes van y vienen. Los jueces de la Corte Suprema permanecen durante generaciones”.
El jueves, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, echó agua fría sobre el esfuerzo y dijo a los periodistas que actualmente no apoya la idea y que no tiene planes de llevar la propuesta a la sala. “No. Apoyo la comisión del presidente para estudiar tal propuesta”, dijo Pelosi, refiriéndose a la comisión de 36 miembros establecida recientemente por el presidente Biden para estudiar el asunto.
“No sé si es una buena idea o una mala idea, creo que es una idea que debería estudiarse”, dijo Pelosi, y agregó: “No tengo planes de llevarla a la cancha”.
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