Miembros del Tea Party apoyarían una reforma migratoria centrada en una política de visas “racional”.
En un hecho inesperado, uno de los cofundadores del Tea Party ofreció su apoyo a la reforma inmigratoria que incluya la legalización de 11 millones de inmigrantes indocumentados.
Sal Russo, del movimiento Tea Party Express con base en California, escribió en un periódico político capitalino que los conservadores deben estar a la vanguardia de la legislación sobre inmigración para asegurarse de que no sólo refleje los intereses de, en sus palabras, "reformadores liberales benefactores".
A pesar de la reticencia de los republicanos en la Cámara de Representantes de aprobar una ley similar a la aprobada por el Senado, un grupo de alcaldes y líderes empresariales de todo el espectro político están determinados en probar que hay un nuevo impulso para reformar las leyes migratorias, aún entre los conservadores.
“Yo no creo que los demócratas sean los que se están moviendo” para tratar la reforma, dijo Russo. “Yo pienso que son los republicanos lo que están mejor dispuestos a tomar acción”, agregó.
En su artículo, Russo dice que “necesitamos hacer que 11 millones de personas que están en Estados Unidos ilegalmente corrijan su situación apegándose a la ley, pagando impuestos y saliendo de las sombras. Tenemos que hacerlos apegarse a la ley a cambio de un estatus legal, pero no una amnistía sin condiciones”.
El artículo, titulado “Los conservadores deben arreglar el roto sistema de inmigración”, comienza reconociendo precisamente, que el sistema “tiene fallas y está roto” y termina diciendo que “es hora de hacer los cambios que nuestros ciudadanos y nuestra economía demandan”.