Revista Salud y Bienestar
La mayor empresa de tabaco masticable de Estados Unidos, 'US Smokeless Tobacco' (UST), ha aceptado pagar unos cinco millones de dólares a la familia de un hombre que murió de cáncer bucal, en el primer caso de indemnización por muerte que ha recaído sobre una compañía de tabaco de mascar, informaron este miércoles medios estadounidenses.
La suma, aceptada por la compañía en un acuerdo extrajudicial con los demandantes, puede inspirar nuevas demandas contra los fabricantes de tabaco masticable que, según los expertos, nunca antes habían pagado indemnizaciones por daños a la salud. Los demandantes acusaban a UST de ser responsable en la muerte en 2003 de Bobby Hill, un hombre de 42 años de Carolina del Norte que empezó a mascar la marca más famosa de la compañía, 'Skoal and Copenhagen', cuando tenía 13 años.
Según el abogado de su familia, Antonio Ponvert III, Hill se aficionó a mascar tabaco en los años 70, cuando los productos de esta variedad no llevaban ningún tipo de advertencia sobre daños a la salud.
"El hecho de que se convirtiera en adicto siendo un niño alejó cualquier argumento de que se trataba de su responsabilidad personal, y la ausencia de etiquetas les impidió decir que lo habían advertido", explicó Ponvert a los medios de comunicación.
El abogado presentó como prueba 60 cartas enviadas por niños a UST en los años 70 y 80, en las que muchos de ellos pedían a la compañía que mantuviera bajos los precios para que pudieran seguir consumiendo los productos, y a las que la empresa respondía en ocasiones regalándoles latas de tabaco masticable.
"Y todo esto era en una época en la que ya había legislación estatal y federal que prohibía la venta de tabaco a menores", señaló Ponvert.
El grupo Altria, propietario de UST desde el año pasado, no ha hecho comentarios sobre esa correspondencia, pero uno de sus portavoces aseguró que el grueso del caso se litigó antes de que adquirieran la compañía, y esperó que éste sea el último en el que se ven involucrados.
Sin embargo, según publica este miércoles el diario The Wall Street Journal, en uno de los documentos del juicio, Altria indicó que hay otras demandas pendientes contra UST, aunque no especificó cuántas.
Las ventas del tabaco de mascar, asociado en la cultura popular estadounidense a los jugadores de béisbol, siguen creciendo en el país al tiempo que descienden las de los cigarrillos, y su uso ha sido incluso recomendado por figuras públicas como método de transición para quienes quieren dejar de fumar.
Aunque son menos letales que los cigarrillos, las marcas más populares de tabaco masticable contienen agentes cancerígenos cuya conexión con el cáncer bucal está cada vez más respaldada por estudios científicos.
Los productos de tabaco que no se fuman muestran advertencias sobre los daños a la salud de los años 80, y éstas se endurecieron en junio de este año con mensajes como "este producto puede causar cáncer bucal", "puede causar piorrea y pérdida de dientes", y "este producto no es una alternativa sana a los cigarrillos".
La suma, aceptada por la compañía en un acuerdo extrajudicial con los demandantes, puede inspirar nuevas demandas contra los fabricantes de tabaco masticable que, según los expertos, nunca antes habían pagado indemnizaciones por daños a la salud. Los demandantes acusaban a UST de ser responsable en la muerte en 2003 de Bobby Hill, un hombre de 42 años de Carolina del Norte que empezó a mascar la marca más famosa de la compañía, 'Skoal and Copenhagen', cuando tenía 13 años.
Según el abogado de su familia, Antonio Ponvert III, Hill se aficionó a mascar tabaco en los años 70, cuando los productos de esta variedad no llevaban ningún tipo de advertencia sobre daños a la salud.
"El hecho de que se convirtiera en adicto siendo un niño alejó cualquier argumento de que se trataba de su responsabilidad personal, y la ausencia de etiquetas les impidió decir que lo habían advertido", explicó Ponvert a los medios de comunicación.
El abogado presentó como prueba 60 cartas enviadas por niños a UST en los años 70 y 80, en las que muchos de ellos pedían a la compañía que mantuviera bajos los precios para que pudieran seguir consumiendo los productos, y a las que la empresa respondía en ocasiones regalándoles latas de tabaco masticable.
"Y todo esto era en una época en la que ya había legislación estatal y federal que prohibía la venta de tabaco a menores", señaló Ponvert.
El grupo Altria, propietario de UST desde el año pasado, no ha hecho comentarios sobre esa correspondencia, pero uno de sus portavoces aseguró que el grueso del caso se litigó antes de que adquirieran la compañía, y esperó que éste sea el último en el que se ven involucrados.
Sin embargo, según publica este miércoles el diario The Wall Street Journal, en uno de los documentos del juicio, Altria indicó que hay otras demandas pendientes contra UST, aunque no especificó cuántas.
Las ventas del tabaco de mascar, asociado en la cultura popular estadounidense a los jugadores de béisbol, siguen creciendo en el país al tiempo que descienden las de los cigarrillos, y su uso ha sido incluso recomendado por figuras públicas como método de transición para quienes quieren dejar de fumar.
Aunque son menos letales que los cigarrillos, las marcas más populares de tabaco masticable contienen agentes cancerígenos cuya conexión con el cáncer bucal está cada vez más respaldada por estudios científicos.
Los productos de tabaco que no se fuman muestran advertencias sobre los daños a la salud de los años 80, y éstas se endurecieron en junio de este año con mensajes como "este producto puede causar cáncer bucal", "puede causar piorrea y pérdida de dientes", y "este producto no es una alternativa sana a los cigarrillos".
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