Los argumentos de apertura comenzarán este miércoles en el juicio político de Donald Trump. Después de un primer día emotivo que llevó a los senadores y a la nación a recordar el ataque mortal del 6 de enero contra el Capitolio de los Estados Unidos.
Los abogados de Trump buscaron detener el juicio por motivos constitucionales, pero perdieron esa lucha el martes. Sus argumentos fueron serpenteantes a veces, dejando a Trump furioso por el desempeño de sus abogados y a los aliados cuestionando la estrategia de defensa. Algunos pidieron otra reorganización de su equipo legal.
Los fiscales demócratas de la Cámara de Representantes buscan vincular a Trump directamente con el motín que dejó cinco personas muertas. Esto reproduciendo videos de los alborotadores que intentaban detener la certificación de la victoria del demócrata Joe Biden y las declaraciones de Trump instándolos a luchar contra los resultados de las elecciones.
Los senadores, muchos de los cuales huyeron por seguridad el día del ataque, vieron los videos gráficos de los partidarios de Trump que lucharon frente a la policía para asaltar los pasillos. Se esperan más videos hoy miércoles, incluidos algunos que no se han visto antes.
Trump marcando records no tan placenteros
Trump es el primer presidente que enfrenta un juicio político después de dejar el cargo y el primero en ser acusado dos veces. El motín siguió a una manifestación durante la cual Trump instó a sus seguidores a “luchar como el infierno”, palabras que sus abogados dicen que eran simplemente una forma de hablar. Está acusado de “incitación a la insurrección”.
“Eso es una ofensa grave y un delito”, declaró el representante Jamie Raskin, demócrata por Maryland, en los comentarios de apertura. “Si eso no es un delito imputable, entonces no existe tal cosa”, agregó.
La seguridad sigue siendo extremadamente estricta en el Capitolio, cercado con alambre de púas y patrullado por tropas de la Guardia Nacional.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que Biden no estaría viendo el juicio. “Joe Biden es el presidente, no es un experto, no va a opinar sobre argumentos de ida y vuelta”, dijo.
Los encargados de la acusación de la Cámara describieron a los agentes de policía mutilados en el caos y a los alborotadores que desfilaban en la misma cámara donde se estaba llevando a cabo el juicio. El equipo de Trump respondió que la Constitución no permite el juicio político en esta fecha tardía.
Nueva estrategia en la defensa
El abogado defensor principal, Bruce Castor, dijo que cambió su enfoque planeado después de escuchar la apertura emocional de los fiscales y, en cambio, habló en forma conversacional con los senadores. Dijo que el equipo de Trump denunciaría el ataque “repugnante” y “de la manera más enérgica posible denunciar a los alborotadores”. Hizo un llamamiento a los senadores como “patriotas primero” y los animó a tener “cabeza fría” al evaluar los argumentos.
El abogado de Trump, David Schoen, giró el juicio hacia un tono radicalmente partidista, argumentando que los demócratas estaban alimentados por un “odio de base” hacia el ex presidente.
Los republicanos dejaron en claro que estaban descontentos con la defensa de Trump, muchos de ellos dijeron que no entendían hacia dónde se dirigía, particularmente la apertura de Castor. El senador de Luisiana Bill Cassidy, que votó con los demócratas para seguir adelante con el juicio, dijo que el equipo de Trump hizo un “trabajo terrible”. La senadora de Maine Susan Collins, quien también votó con los demócratas, dijo que estaba “perpleja”. La senadora Lisa Murkowki de Alaska dijo que era una “oportunidad perdida” para la defensa.
Seis republicanos se unieron a los demócratas para proceder con el juicio, pero la votación de 56 a 44 estuvo lejos del umbral de dos tercios de 67 votos que se necesitaría para la condena.
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