Efectos colaterales de las derrotas

Debería ser fácil gestionar cualquier derrota siempre que se tenga asumido y educada la concepción de que el deporte es victoria y derrota, ahí está el kid de la cuestión. Enmedio de estos 2 términos antagónicos dista acierto, preparación, coraje, resistencia a la derrota, sacrificio, esfuerzo, temple para evaluar los fracasos y gallardía para salir de ellos, superación o saber estar entre otros. Cuando se gana todo el mundo da la cara, todos quieren salir en la cámara, todo es magnífico y para ello siempre se está preparado y dispuesto, pero ¿¿y cuándo perdemos??, ¿cómo se gestiona la papeleta?.....sin duda siendo rigurosos con lo expresado en el párrafo anterior. A todos nos ha indignado caer en este Mundial y si habíamos maravillado al mundo por el CÓMO lo hacíamos, no podemos caer en la trampa fácil de ciertos comportamientos manchando la imagen que desde siempre, este grupo de la Selección Española, ha proyectado al mundo. Está clarísimo que hemos preparado mal este Mundial. No se ha sido meticuloso en aspectos que luego salen; quizá no se haya gestionado correctamente la confección del grupo; sorprendentemente en la competición hemos traicionado a nuestros principios futbolísticos; nunca hemos reaccionado con esfuerzo y resistencia a los momentos malo y ha sido relativamente fácil ganarnos. Más adelante, seguro, nos daremos cuenta que no era el torneo de la patata sino un Mundial..... Vale, todo eso es asumible, no hemos estado a la altura, hacemos propósito de enmienda y para casa, es deporte. Lo que en ningún caso debe ser tolerable son ciertos comportamientos que dejan en entredicho que los ideales de este grupo fueran tan sólidos como hemos proyectado cuando nos ha ido bien. Como datos negativos a mí me quedan: 1-Mala respuesta competitiva cuando nos hemos puesto por detrás en el marcador contra Holanda y Chile. 2-Pasividad de Del Bosque en el descanso contra Chile cuando perdíamos 0-2 en cuanto a movimiento en el equipo. 3-Injustificable el comportamiento de Cesc (me encanta su fútbol y cómo de fácil lo hace sobre el campo), cual niñato, con pataletas impropias de un jugador de la Selección Española donde el objetivo grupal por encima del individual debe primar. 4-Poca profesionalidad y falta de compañerismo de Villa con su actitud, sacando a la luz una vez más la anteposición que suele ser general en el mundo del fútbol en la que el jugador antepone sus intereses a lo del resto del grupo. 5-La falta de protocolo para atender a medios de comunicación y actitud esquiva de los jugadores para no dar la cara en la derrota. 6-El gesto de Piqué en el banquillo. Son tan torpes algunos jugadores al realizar determinados gestos cuando saben que decenas de cámaras siguen cada parpadeo que hacen.... 7- Y para rematar el cuadro, la vuelta a casa, protagonizando episodios propios de una banda; unos se quedan en Brasil, otros vienen en el vuelo; de los que vienen en el vuelo unos lo hacen con la indumentaria oficial y otros en vaqueros......cuando les esperan los aficionados ahora salen por otra puerta......¿ésto que es?, ¿cómo es que los responsables, Seleccionador y/o Federación, no son diligentes en ello?. O se es escrupuloso en estos detalles o el halo de endiosamiento que hemos creado entorno a la Roja se esfumará en un santiamén. Todos estos han sido los efectos colaterales del fiasco de nuestro Mundial. Debemos estar a la altura y ser íntegros en las derrotas como lo hemos sido en las victorias. Ah, señores, a quien corresponda, que se haga una letra para nuestro himno ya. Es espeluznante y emotivo contemplar cómo los jugadores de todas las Selecciones cantan su himno a grito limpio, se agarran el escudo, se emocionan y lo viven. Siento envidia sana. ¿Lo veremos algún día en los nuestros?.