Hace un año, el 12 de noviembre de 2014, el módulo Philae de la sonda espacial Rosetta aterrizaba en el cometa 67P/Churiumov.
Rosetta es una sonda espacial de la Agencia Espacial Europea (ESA) que fue lanzada en un cohete Ariane 5, desde la Guayana francesa, el 2 de marzo de 2004 con la misión de obtener muestras del cometa, su coma y los gases expulsados y analizarlos con la instrumentación científica de a bordo.
La necesidad de ahorro de combustible obligó a planificar una compleja trayectoria de vuelo que incluyó tres sobrevuelos a la Tierra y uno a Marte para obtener una asistencia gravitatoria que permitiera ganar velocidad para poder alcanzar la alejada órbita del cometa de destino.
Los cometas contienen materia como la primitiva de nuestro sistema solar, y han sufrido muy pocas modificaciones desde hace más de 4000 millones de años. Por eso estudiarlos es una tarea prioritaria para la ciencia. Hasta el proyecto de esta sonda, solamente se habían realizado sobrevuelos a los cometas, y esta es la primera sonda que estudia detalladamente un cometa, tanto orbitando alrededor de él, como llegando a la superficie.