Nunca es tarde si la dicha es buena: hace dos años Paisaje Transversal colaboramos en el proyecto Transïtoak, una iniciativa de urbanismo adaptativo impulsada por el Centro Internacional de Cultura Contemporánea Tabakalera de Donostia. Dentro de este proyecto Paisaje Transversal nos encargamos de desarrollar #EgiaMapa, un proceso urbano en el barrio de Egia de dicha ciudad que estuvo dividido en dos fases: una primera dirigida a realizar un mapeo colectivo y generar un catálogo de los espacios en desuso del barrio; la segunda tomaba como punto de partida estos resultados y tenía como objetivo el diseño de unos protocolos de activación de los espacios identificados. Se trataba de generar una herramienta que permitiera establecer una serie de pautas fácilmente comprensibles de manera que cualquier persona, de forma autónoma, pudiera poner en marcha iniciativas y desarrollar actividades en las plazas, calles o locales comerciales de Egia. Para ello los protocolos traducían la complejidad normativa y de tramitación en una sencilla sucesión de pasos a seguir, en unas instrucciones de uso fácilmente comprensibles.
Lamentablemente, nuestras urgencias cotidianas, la concatenación de proyectos y, en general, la falta de tiempo, no nos han permitido hacer una presentación en condiciones de estos protocolos de activación del espacio público. Así que sirva este artículo para presentar en profundidad el planteamiento, el desarrollo y el potencial de esta herramienta de transformación y apropiación ciudadana del espacio público. Pero para eso es necesario contar la historia desde el principio. Así que retrocedamos al origen mismo del proceso #EgiaMapa.
Transïtoak nace, como su nombre indica, como un proyecto de tránsito. Una estrategia mediante la cual Tabakalera trataba de aprovechar su condición nómada de aquel entonces –está prevista la apertura de su nueva sede para después de verano de este año- para reflexionar sobre los espacios urbanos y los usos que las personas hacen de ellos. Desde la idea del meanwhile urbanism (urbanismo del mientras tanto) aborda también la condición cambiante de estos usos y estos espacios a lo largo del tiempo. Haciendo de la necesidad oportunidad, la falta de un espacio físico de referencia desde el que llevar a cabo su actividad llevó a Tabakalera a buscar espacios en el barrio en el que se sitúa, Egia.
Estrategias para activar el espacio público
En este contexto, #EgiaMapa se inicia como un proceso de urbanismo y mediación en el que identificar junto con la ciudadanía y los agentes socio-culturales del vecindario los espacios carentes de actividad y plantear nuevos usos para estos. Se trata con ello de revertir la idea de espacios en desuso hacia el concepto de espacios potenciales. El objetivo de esta primera fase fue por tanto generar una cartografía colectiva y un catálogo de espacios infrautilizados en los que se recogían las necesidades vecinales y los usos propuestos o potenciales de los mismos. No es el objeto de este artículo describir pormenorizadamente este proceso, que ya relatamos en su momento -podéis encontrar toda la información aquí-, sino definir el contexto bajo el que tuvo lugar la segunda fase del proceso.
Así, de los resultados obtenidos en la primera fase de #EgiaMapa, surgía la necesidad de trabajar sobre las estrategias para la puesta en marcha de las iniciativas recogidas en ella. Para ello se optó por diseñar un protocolo de activación adaptado a las necesidades del barrio que facilitase la puesta en uso de los espacios identificados, tanto públicos como privados.
Para ello, Paisaje Transversal, con la inestimable colaboración de Manu Fernández, acometimos la tarea de analizar detenidamente las diferentes normativas y trámites burocráticos que afectaban al desarrollo de actividades tanto en el espacio público como en los locales comerciales. Aquí, nuestros conocimientos en arquitectura resultaron vitales, tanto a la hora de analizar las cualidades de los espacios y las normativas que les afectan, sintetizando las posibilidades y las limitaciones para desarrollar actividades o programas; como para «traducir» esta complejidad en unas instrucciones fácilmente entendibles por cualquier persona.
Una vez realizado este estudio desarrollamos los protocolos de activación según el origen público o privado de los mismos.
Por un lado, los espacios públicos, ya sean calles de circulación rodada o espacios de estancia como plazas y parques, requerían una serie de trámites de relativa sencillez que podían ser acometidos con facilidad. Se abrían con ello posibilidades de peatonalización para el caso de la calle Tejería -una de las principales demandas surgidas en la fase anterior- así como la implantación de mercadillos, conciertos o exposiciones en lugares como plaza Haundi e Iruresoro. La activación de locales presenta en cambio mayor complejidad.
Reactivación de espacios comerciales: ¿realidad o ficción?
El caso de los locales comerciales merece ser analizado con mayor detenimiento, pues la complejidad de la normativa que atañe a los mismos es mayor y cuenta con una serie de problemáticas específicas cuya resolución resulta bastante intrincada.
Al igual que en otros tejidos urbanos con una falta de dinamismo acusada, nos encontramos en el caso de Egia con un parque de locales poco adaptado al ordenamiento jurídico actual (particularmente al Código Técnico de la Edificación y a las diversas ordenanzas municipales), lo que implica que la puesta en uso de estos espacios conlleva una inversión económica de envergadura. Este hecho no sólo limita la implantación de usos por las elevadas inversiones que precisa la adaptación a las distintas normativas (evacuación, incendios, accesibilidad, etc.) y su puesta en funcionamiento de estos locales, sino que dificulta la aparición de nuevas actividades si la inversión inicial necesaria no se ve compensada por la obtención de rédito económico.
La adaptación al CTE, que en el caso de los usos de vivienda -relativamente estables en el tiempo- no supone un gran impedimento, se convierte en el caso de los locales destinados a usos comerciales o de pública concurrencia en una traba fundamental. Para garantizar su capacidad de adaptación a la normativa y a los cambios de la propia sociedad y a las necesidades de los tejidos urbanos las obras de reforma necesarias resultan bastante costosas.
A esto se suma la falta de reconocimiento en la normativa de los usos de carácter temporal, una situación que si bien es entendible, podría ser abordada en un futuro como palanca de dinamización y reactivación de tejidos urbanos. Pero esto solo sería posible a través de la modificación de las ordenanzas municipales, lo cual requiere de voluntad y consenso político para realizar los cambios necesarios.
Pese a estos impedimentos, de carácter estructural y que exigen de un trabajo de mayor calado, los Protocolos de Activación resultado de esta segunda fase han facilitado los canales para la puesta en uso de los espacios de oportunidad detectados en #EgiaMapa. Mediante este documento se pone a disposición de las entidades y los vecinos de Egia un sencillo manual que define las posibilidades existentes en función de la naturaleza de los agentes que llevan a cabo la iniciativa (particulares o entidades), el tipo de actividad a desarrollar o el presupuesto del que se dispone.
Expulsar la ciudad de la ciudad
Uno de los puntos fundamentales al que estos protocolos de activación de espacios no pueden hacer frente es a la adecuación de los locales a las normativas vigentes: el surgimiento de ordenanzas que garantizan unas condiciones mínimas de bienestar, salubridad y habitabilidad de los locales no han estado acompañadas de políticas que facilitasen la adaptación de los locales más antiguos a esas exigencias normativas. En esta tesitura el margen de maniobra para la activación de dichos locales es escaso o prácticamente nulo, lo cual tiene un efecto negativo en las dinámicas socioeconómicas de la ciudad: vaciar de vida urbana los barrios, expulsar la ciudad de la propia ciudad. Desde luego es todo un debate que los consistorios deberán de empezar a plantearse seriamente.
Lejos de que esta situación se convirtiera en un callejón sin salida, desde Paisaje Transversal se planteaban algunas posibilidades para llevar a cabo un programa en beta que pudiera ser asumido por los organismos municipales correspondientes, y que exigiría de la intermediación con propietarios y potenciales usuarios, así como la definición de programas y fórmulas de colaboración entre agentes públicos y privados para la puesta en activo de locales y la mejora del tejido productivo de los barrios.
Encontramos ejemplos de estas prácticas y de iniciativas semejantes en ciudades inglesas como Leeds, Cambridge o la ciudad australiana de Newcastle. En este sentido, resulta significativo cómo en los países anglosajones se cuenta ya con numerosas experiencias a este respecto, desarrollando fórmulas de colaboración público-privada que en nuestro entorno percibimos aún como incipientes y de compleja implementación, pero sin duda posibles y necesarias. Por el interés y las particularidades que estos ejemplos presentan, y en especial por los retos que la iniciativa pública y privada plantea -el balance del interés general frente a la lógica de la oferta y la demanda-, reservamos este tema para una futura publicación que profundice en estos aspectos.
Por lo que sabemos, estos protocolos ya están siendo utilizados para el desarrollo de actividades en el espacio público, como es el caso de las actividades realizadas con el Txiringailu -un dispositivo móvil para la activación del espacio público diseñado por M-Etxea en colaboración con el equipo de mediación de Tabakalera-, por lo que parece que el diseño de este tipo de herramientas para la activación de espacios puede ser una vía de lo más efectiva para la dinamización de la actividad de nuestras ciudades.
A continuación os presentamos el documento que elaboramos para los protocolos de activación de Egia, para que podáis profundizar en su comprensión y podáis descargarlo.
Más información:
Protocolos de activación de Egia
Proyecto #EgiaMapa
EgiaMapa en el Blog
Créditos de imágenes:
Imagen 01: Protocolos de Activación de Espacios en Egía (Elaboración propia)
Imagen 02: Árbol de protocolos (Elaboración propia)
Imagen 03: Estudio de protocolos de activación mediante la participación (fotografía: Victor Iriarte)
Imagen 04: Estudio de protocolos de activación mediante la participación (fotografía: Victor Iriarte)
Imagen 05: Localización Ciudadana de espacios en desuso. (fotografía: Victor Iriarte)
Revista Arquitectura
#EgiaMapa: Protocolos de activación de espacios (públicos y comerciales)
Por Paisajetransversal @paistransversalSus últimos artículos
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