Sabía que el ejercicio y la dieta son cuestiones importantes, sobre todo cuando hablamos de embarazarnos, pero debo ser sincera y reconocer que antes de meterme en esta comunidad 2.0 no comprendía cuánto.
Después de casarnos, al pasar el verano, la verdad es que me convertí en una bola. Subir a mi segundo piso sin ascensor cada día era un suplicio y decidí que no podía seguir así. Por mucho que yo no me viera gorda, cada vez me podía poner menos pantalones.
Nos apuntamos al gimnasio y al pesarme antes de empezar para ver cómo iba evolucionando, me encontré con la realidad: 78 kilos metidos en 1,65 m. No tenía afán por adelgazar, ni por tener tipín, quería estar sana. Nunca pensé que aquello se desmadraría tanto.
Al mes de empezar el gimnasio tuve mi última luxación de rodilla. Siendo la quinta, el doctor insistió mucho en la necesidad de una operación. Así que dos meses más tarde entré en quirófano.
Desde entonces todo se me ha hecho más cuesta arriba de lo que nunca pensaba que se me haría. Lo bueno es que estaba consiguiendo bajar de peso (como pudisteis ver en ovuview), pero no con ejercicio ni con dieta.
Había dejado los dulces a un lado, intentaba hacer caso a mi nutricionista y comer más a menudo con más variedad. Aquello parecía que estaba evolucionando. Pero ya me he quedado estancada. Ahora tengo que poner más esfuerzo y empezar a hacer las cosas bien de verdad. Por ejemplo, cuidar de incluir las verduras a mis comidas.
No es que no me gusten. Si no que no planifico bien las compras para la comida y al final me quedo sin tiempo para preparar lo que más me conviene. Quiero acabar con esta mala costumbre y hacerme platos completos. Ya me los hacía sanos, pero no combinados adecuadamente.
Mientras tanto, aquí os dejo mi plan de comidas recomendada por mi nutricionista:
El tema de la fruta la verdad es que lo llevo especialmente mal. Hasta el del yogur me cuesta y me tengo que obligar a ello. Las comidas, como no me gustan en general, pues me da igual… pero no soy capaz de planificarme. Lo llevo realmente mal.
Lo que quería comentar sobre todo es el tema de que mientras unos te recomiendan mirar tu IMC, mi nutricionista me pesaba con una bascula especial y hacía mucho incapié en el % de grasa. Ahora tengo yo también una bascula de ésas en casa y me puedo medir yo misma el % de grasa, que es lo realmente importante en lo saludable que se está. El inconveniente es que no se puede calcular, se tiene que medir con una bascula especial.
Uno de los tratos que tengo con Futuro Papá es que debo recuperarme totalmente de la rodilla. Todavía tengo el cuádriceps débil y no puedo correr ni saltar. Así que me estoy afanando en comer sano para bajar peso y haciendo ejercicio para recuperar la musculatura.