Todos queremos tener una vejez feliz y poder disfrutar de la vida. En el caso de las mujeres, la mayoría se orienta a comprar productos de belleza "antiaging", cuidar su cabello, hacer todo lo que no hicieron antes, etc., pero cuando se busca información sobre el secreto de una vejez saludable, que permita disfrutar la vida, el énfasis de los expertos está en dos puntos: alimentación saludable y ejercicio físico adecuado a la edad y las condiciones de la persona.
Sobre lo primero se ha dicho y escrito de todo, y existe hiperabundancia de información, pero sobre lo segundo hay un poco menos, pues cuando vamos ganando años el cuerpo a veces va acumulando dificultades particulares que no siempre son compatibles con algunos ejercicios.
Ése es mi caso, pues mi escoliosis no me permite hacer movimientos que impacten en mi columna o le exijan esfuerzo. He pasado por varios instructores y personas entendidas, y en algún punto terminaba haciendo algo indebido con la posterior inevitable contractura de espalda que me dejaba una semana fuera de toda actividad, sin contar el dolor al menor movimiento y todas las complicaciones de juntar ambas cosas. No fue hasta que llegué a una cirujano retirado que se dedica a la acupuntura, que después de eliminar mis dolores y permitirme caminar derecha de nuevo, me dio la receta perfecta: "haz aquello que no te ha lastimado nunca, pues probablemente nunca lo hará".
Desde ese día camino mucho y sigo una rutina de ejercicios muy suave que, sin afectar mi espalda en absoluto, me permite mantener la elasticidad, realizar actividad focalizada, controlar mi peso y calmar mi ansiedad, pues es conocido que el ejercicio es un poderoso agente anti-estrés.Aquí comparto los ejercicios que yo realizo. Sólo necesitas ropa cómoda (te recomiendo usar buenas zapatillas, que te darán adherencia al piso y comodidad al ejercitarte) y un par de pesas ligeras para iniciar el trabajo de brazos. Puedes tomar los ejercicios que te agraden e ir aumentando poco a poco. Con el tiempo podrás agregar ejercicios nuevos o hacerlos con mayor complejidad, añadiendo otros movimientos. etc. Lo importante es empezar, y para ello cinco recomendaciones importantes:
- Si antes has realizado ejercicios de este tipo, enfócate en realizarlos adecuadamente. Una mala postura o una posición indebida al realizar éstos o cualquier otro ejercicios, puede causar lesiones.
- Si nunca has realizado ejercicios de este tipo, busca a alguien que te enseñe cómo realizarlos adecuadamente.
- El beneficio del ejercicio no está en la fuerza o en la rapidez sino en realizar un número cada vez mayor de repeticiones. Puedes comenzar con 3, 5 o 10 repeticiones, siente lo que tu cuerpo permite. Paciencia y perseverancia.
- Los ejercicios deben realizarse lentamente, para que sean los músculos los que trabajen, no el impulso del movimiento.
- Debes calentar al inicio (caminar 30 minutos a paso firme es excelente) y estirar al final. Así tu cuerpo trabajará en condiciones amigables y tus músculos realizarán un esfuerzo adecuado y no perjudicial.
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