El pasado 14 de septiembre pudo constatarse un hecho que ya conocíamos: el delito del aborto
existe y por primera vez va a ser enjuiciado.
Como dijo don Javier Pérez-
Roldán, presidente del Centro Jurídico Tomás Moro “los defensores del aborto se han empeñado durante más de 25 años en
realizar una afirmación falsa: con la legalización del aborto se acabaría con
la comisión de abortos ilegales. Sin embargo la realidad afirma todo lo
contrario, a saber: todos y cada uno de los delitos que figuran en el código
penal se cometen diariamente, el aborto igual que los demás. Si el código penal
reprocha una serie de actuaciones que el común de la gente considera contrarias
al orden social, es precisamente porque la realidad demuestra que dichas
conductas efectivamente se cometen. ¿Por qué el aborto va a ser distinto? si el
aborto es un delito, la lógica jurídica y forense determina necesariamente que
en múltiples ocasiones se cometen delitos de aborto".
Si hasta la fecha la sociedad española no ha presenciado
juicios a médicos abortistas, no ha sido por la inexistencia del delito, sino
por la inactividad de las administraciones públicas, ya sean estateles o
autonómicas, ya sean administraciones gobernadas por partidos de izquierda o de
derecha. Durante más de 25 años los poderes públicos han visto como algunos se
lucraban con la desgracia de las mujeres embarazadas y han mantenido un criminal
silencio e inactividad.
Ahora, gracias al
esfuerzo de varias asociaciones, al buen trabajo de la guardia civil y a la
profesionalidad de algunos miembros de la judicatura, se inicia un procedimiento contra el doctor Marín, que constituye un hito en la historia de la defensa de la vid. Mientras se articula una nueva ley que regule el aborto, se hace necesario por parte de las autoridades nacionales y autonómicas que ningún aborto se puede practicar con dinero público, pues
ello significa trasladar la responsabilidad moral a toda la sociedad española. Por otra parte, es necesario aprobar una nueva ley, con carácter nacional y alejada de
toda ideología. Una nueva ley que proteja a la familia, y proporcione a la mujer mayor libertad para poder seguir con su embarazo. Claro que existe una crisis económica brutal en España, pero no es menos evidente que esa crisis es consecuencia de una crisis moral que padece nuestro país desde hace muchos años.