El Almacén Automatizado en la Logística Actual

El pasado 21 de febrero se celebró en la sala de Juntas de la Escuela de Ingeniería Minera e Industrial de Almadén la conferencia “El Almacén Automatizado en la Logística Actual” por el Doctor Javier de las Morenas, Profesor de la misma escuela. En la conferencia se discutió la problemática asociada a los centros de distribución dentro de la logística, centrándose en el almacén; elemento que durante mucho tiempo se ha considerado un mal necesario dentro de las empresas; pero que, hoy en día, se ha convertido en un elemento estratégico dentro de la gestión de la cadena de distribución. Para ello, ha sido necesario el desarrollo de nuevos sistemas de automatización y control, en los que términos como picking, RFID, pick-to-light, AGV, cadena de frío y trazabilidad son cotidianos.
  Los almacenes automáticos que hoy en día se utilizan son fruto de la evolución que éstos han ido sufriendo ante el crecimiento de los mercados. Su función, pese a lo que pueda parecer por la definición de su propio nombre, no es la de almacenar; sino, la de circular productos. Este hecho queda plasmado a la hora de estudiar el flujo de materiales que existe dentro de un centro de distribución. Un producto llega al sistema por la zona de recepción, donde es identificado, incluido en el sistema de gestión y asignado a una ubicación dentro del almacén. El siguiente paso es llevarlo hasta el almacén donde se almacenará atendiendo a diferentes políticas de gestión (tómese por ejemplo FIFO, ó LIFO) y se ubicarán de manera caótica, semicaótica o fija. Los productos ya almacenados quedan a la espera de la llegada de un nuevo pedido, para ser enviados a la zona de picking o de preparación de pedidos, donde, una vez conformado y consolidado el pedido, se mandará a expedición. Éste es el flujo, a groso modo y obviando etapas intermedias, que sigue un producto dentro del almacén. En el caso más extremo encontramos el cross-docking, donde el almacén es un centro de tránsito y la mercancía pasa directamente desde recepción a expedición. Ante este panorama, parece lógico automatizar todos estos procesos, tanto por productividad como por seguridad; ya que, en el caso de contar con un almacén no automatizado, a la hora de requerir mayores niveles de productividad, se hace necesario incluir más personal y maquinaria en tránsito en el almacén, que conllevan entornos de trabajo más peligrosos y poco eficientes. Pero la automatización de estos sistemas ha de pasar por un sistema de control descentralizado, en el que cada uno de los elementos que forman el centro, cuenten con capacidades de toma de decisión. Adicionalmente, ante lo incierto de los mercados, las previsiones de venta pierden su valor por su poca fiabilidad; por lo que, no es posible adelantar tareas. De este modo, los sistemas automatizados han de ser flexibles, ágiles y reactivos para completar los pedidos a tiempo y maximizar la satisfacción al cliente. En este sentido, el Profesor de la Escuela de Ingeniería Minera e Industrial de Almadén, Dr. Javier de las Morenas en su Tesis Doctoral “Desarrollo e Integración de Sistemas de Control Distribuidos y Gestión Industrial Mejorados con la Identificación por RF”, estudió un sistema de control distribuido estructurado en dos niveles y formado por agentes que afrontan los requerimientos impuestos en la actualidad. El primer nivel se encarga de la gestión de la empresa; mientras que el segundo se ocupa del control en planta. A la hora de declarar cada uno de estos agentes, se aprovechan las diferentes características que ofrecen los agentes. Para los procesos de planificación, se explotan las características de proactividad y las capacidades sociales de los agentes; mientras que, para procesos de control en planta se utiliza su carácter reactivo. De este modo, se consigue responder a las necesidades de reaccionar rápidamente ante la aparición de imprevistos. El sistema se complementa con el uso de la tecnología de identificación por radio frecuencia, que permite desacoplar, alinear e integrar el funcionamiento de ambos niveles, generando la visibilidad necesaria entre ellos.   Fuente: D. Fuentes