El amoto

Me estoy sacando el carnet de moto.

No, no tengo necesidad. Y no, no había cogido una moto antes en mi vida. Sí, tengo el carnet de coche así que no, no me hacía falta sacarme un carnet nuevo para agenciarme una 125 y ser uno más por las calles de Barcelona. Sí, me está costando un huevo y voy a hacer prácticas cuando puedo y quiero. Sí, me estoy dejando una pasta y no, no estoy para regalar el dinero. Sí, le he comprado una moto de tercera mano a un amigo. Sí, antes de sacarme el carnet. No, no la he arrancado en un tiempo así que no, no lo he hecho como lo habrías hecho tú, que lo habrías hecho mejor. Mucho mejor.

Hace unos meses, cuando empezó todo esto, me detenía a contestar uno a uno: que si la crisis de los 40 no me va a pillar entrenando para una maratón, que si yo soy un poquito old fashioned y me ha dado por la moto, que si me apetecía aprender algo nuevo, testarme, pero sin prisas, sin agobios, por el mero placer de aprender… y luego el placer del viento en la cara. Que si la moto de mi amigo era una oportunidad irrenunciable, que si tal, que si cual. Más tarde me fui cansando y recurrí a referentes viejunos para salir del paso. Confieso que ahora contesto a cada consulta con la mano en la bolsita reproductiva (desde dentro del bolsillo si no hay confianza) y una palabra soez.

Estoy pasando una época de acoso cuñadil a cuenta de la moto. Reconozco que es un cuñadismo de baja intensidad. No es como compartir piso con Bertín Osborne, Risto Mejide y Arturo Pérez-Reverte recordándote desde el desayuno que no te has tirado a media España (la femenina) ni te has reinventado seiscientas veces ni has cagado sangre en una trinchera. ¡Que no has vivido, coño! No, este cuñadismo al menos es más llevadero. Pero ahí está.

Eso sí, ahora me pregunto qué pasaría si no estuviéramos hablando de un tonto capricho de la mediana edad, sino de algo un poco más serio, algo de verdad.

Me pregunto, además, cuántas veces te habré pillado yo por banda y te habré espetado: ¿Así lo vas a hacer? Pues vaya mierda.

Yo, en unos meses (http://lasubiditaatope.com)