El aparador perfecto existe y se llama «A Medida»

No, no nos hemos vuelto locos con esta propuesta. Ya sabemos que lo normal es tener una cocina a medida y si nos venimos un poco arriba, como mucho, la habitación de los niños, pero … ¿aparadores? Pues sí, los aparadores a medida pueden darte satisfacciones que posiblemente no habías considerado.

Mobiliario a medida

Nos planteamos un mueble a medida cuando el espacio disponible es limitado, con entrantes o huecos irregulares, pues sabemos que con él aprovecharemos al máximo los metros útiles de la vivienda. Y estamos en lo cierto. Es un traje a medida que resulta especialmente útil en apartamentos o habitaciones pequeñas –lo habitual, vaya– donde el mobiliario ready made puede convertirse en un estorbo. Como ejemplo, fíjate en la sensación de amplitud que rezuma este salón (

foto) a pesar de contar con muebles de gran formato y capacidad de almacenaje. La unidad de materiales, colores y su disposición alrededor de la habitación obran el milagro.

El diseño es de ENZO MUEBLES, empresa especializada en todo tipo de mobiliario a medida, donde no solo dan vida a tus deseos, sino que ellos mismos te aconsejan y diseñan aquello que tu casa necesita.

Aparador a medida personalizado

Pues bien, lo mismo te puede ocurrir cuando la pieza en cuestión es un aparador. Cierto es que, solo en contadas ocasiones, la adaptabilidad al espacio podría ser el principal motivo para necesitar un aparador a medida: imagina, tienes un casoplón y no encuentras un aparador que mida 4 metros de largo (bendito problema!!) Pero incluso para los que no están en esta situación –que digo están, ¡estamos!–, las ventajas de diseñar un aparador a medida están claras:

COHERENCIA — Especialmente importante cuando diferentes ambientes se integran en un mismo espacio. Es el caso de la cocina, el comedor y el salón. Si empleas el mismo tipo de acabado, o una línea similar de diseño, conseguirás que el conjunto respire unidad y amplitud.
PERSONALIZACIÓN — a) Sabes muy bien lo que quieres, pero lamentablemente no coincide con lo que el mercado te ofrece; o b) le has echado el ojo a un aparador la mar de mono, pero su color no es el Pantone exacto que necesitas. Cualquiera de estos escenarios es una razón más para decantarte por una pieza exclusiva y personalizada que te haga feliz.
CAPACIDAD — Pocas veces solemos pensar en la capacidad de un aparador y eso que, por definición, un aparador es un mueble para almacenar. Este es un punto clave para saber si con un aparador prêt-à-porter te arreglas, o sería mejor que encargases uno Haute Couture. Mi consejo es que listes y midas todo lo que quieres guardar. Así acertarás con su fondo, altura y con la división de su espacio.
MATERIALES — Tendemos a pensar que los aparadores solo se realizan en madera, y sin embargo el abanico de acabados es tan amplio como la propia imaginación: DM, Krion, acero inoxidable, mármol, metal o lo que se te ocurra. Decidirte por uno u otro dependerá tanto de tus gustos como de la coherencia que ya comentamos antes, aunque también es posible que tu bolsillo reclame su derecho a veto.