El arranque del Festival Luna Lunera no ha podido sonar más internacional. El viernes fue Imelda May quien tuvo el honor de dar el pistoletazo de salida a la temporada 2010 de conciertos en la lonja medieval de Sos. La irlandesa consiguió que la calidez de su voz cubriese el graderío consiguiendo que los asistentes olvidáramos el frío que nos acompañó durante todo el fin de semana. El estilo Rockabilly de la irlandesa, que saltó al escenario ataviada con un llamativo vestido de rayas blancas y neggras y acompañada de un clásico cuarteto de batería, contrabajo y dos guitarras, contagió al público desde la primera canción, obligando a los más marchosos a levantarse de sus asientos para bailar. Temas como Love Tatto o la versión del Tained Love de Gloria Gaynor hicieron las delicias del público que se preguntaba como es que artistas como la que teníamos delante no copaban las emisoras de radio musical y pasaban desapercibidos para la mayoría del público. La actuación fue transcurriendo entre generos como el blues, jazz, rockabilly, y en cada uno de ellos la potente voz de la Irlandesa sonaba con una desgarradora fuerza. La banda es perfecta por su elegancia para acompañar a semejante voz. Como guinda para su actuación, Imelda se metió al público en el bolsillo con unos juegos de voces y coros en los que retaba al público hasta unos niveles que sólo las voces privilegiadas como la suya pueden llegar. Estupendo arranque para el Festival Luna Lunera.
Las damas primero, y despues, el esperado caballero …del Soul. Eli “Paperboy” Reed saltó al escenario arropado por la gran ovación de un público al que Imelda previamente había dejado en el punto justo de cocción. Bastaron un par de temas del de Boston y sus “True loves” para que el público empezara a mostrar las efusivas muestras de agradecimiento capaces de dar alas a Eli para culminar el concierto como nadie se imaginaba. La banda de Eli sonaba enorme, con su multirracial banda que daba color a cada uno de sus fraseos. La voz de Eli sonaba enorme, hasta tal punto que cuando un problema con el equipo se interpuso en el transcurso de la actuación, Eli lo convirtió en una oportunidad para demostrar su saber hacer, su fuerza y hasta dónde son artistas él y los suyos. Aún no era consciente todo el público del fallo en el equipo cuando, observando la petición de silencio de Eli, callaban espectante sin imaginar el derroche de arte a capella que nos iba a regalar el gran Eli Paperboy Reed. Ni que decir tiene que esto hizo el concierto único e irrepetible. Quizás en otro sitio no se hubiese producido tal espectáculo, pero es lo que tiene Luna Lunera, que los artistas superan cualquier adversidad con tal de poder empapar las piedras de la lonja con su arte.
Gracias a Lucía por las fotos, y a Gibson Spain por los videos …y lo demás.
¡Nos vemos en la Luna Lunera!