El asma consiste en una afección pulmonar que requiere tratamiento adecuado cuanto antes. Sobre todo necesita ser más controlada en el embarazo, por la madre y por el bebé. El asma bien controlado tiene pocos efectos sobre el embarazo, aunque el embarazo puede complicar bastante el asma, por lo que es importante poder controlar el asma en esta época tan importante. Un tercio de las embarazadas mejoran, otro tercio no tiene cambios y el otro tercio empeora, ¿a qué grupo perteneces?
Es muy importante tener un buen control médico durante todo el período de la gestación para poder evitar las complicaciones que puede suponer un asma mal controlado. Las crisis muy severas de asma pueden dar lugar a falta de oxigenación en el bebé afectando a su salud, pero esto sólo en los casos más graves que no son frecuentes ya que las embarazadas están más preparadas y existen muchos medicamentos seguros contra el asma en el embarazo.
Es muy importante evitar el contacto con productos que den lugar a ataques de asma, no fumar, evitar enfermedades como las infecciones respiratorias y tomar la medicación que ha recetado el médico. Si el segundo o tercer trimestre del embarazo son en otoño o invierno, puede ser bueno vacunarse contra el virus de la gripe.
El asma puede empeorar hacia el tercer trimestre del embarazo o finales del segundo, aunque en algunas mujeres puede incluso mejorar. Muchos de los medicamentos para el asma son seguros en el embarazo, aunque es mejor consultar con un médico con el que además hay que tener un buen control a lo largo de todo el embarazo por la salud propia y la del feto.
Son varios los estudios sobre el asma en el embarazo. Uno de ellos dice que no tratar e asma puede dar lugar a partos prematuros, bebés con bajo peso al nacer o hipertensión arterial o preclampsia.
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