Una de las peores noticias que podíamos recibir en estos momentos era la referente
al aumento del desempleo. Las cifras dadas a conocer hace unos días son un jarro de agua fría para cualquiera que albergue alguna esperanza en la recuperación de la economía.
Según las estadísticas publicadas, en el conjunto de la nación el paro subió en 95.817 en el mes de septiembre. Por lo que respecta a la Comunidad Valenciana, el número de desempleados registrados en las oficinas del Servicio Público de Empleo aumentó en 8.222 personas en el mes de septiembre (un 1,59% más que en agosto) y suma ya 525.725 parados.
En cifras absolutas, la Comunidad Valenciana es la quinta autonomía donde más se incrementó el desempleo, por detrás de Andalucía (+23.592), Cataluña (+16.282), Madrid (+10.209) y Galicia (+8.336). Por provincias, el ascenso del desempleo es mayor en Alicante, con 4.250 parados más, un 2,11% más respecto a agosto; y en Castellón, con 2.269 nuevos parados, lo que supone una subida del 3,94%. En Valencia son 1.703 los nuevos registrados en el Servicio Público de Empleo, un 0,66% más que hace un mes.
¿Y en nuestra localidad? He introducido los últimos datos publicados por el SERVEF y he actualizado la hoja de cálculo que tengo abierta desde hace varios años, generando los dos gráficos que siguen más abajo. Se observa que, pese a la ligera subida, se mantiene una cierta estabilidad desde hace un par de años. No dispongo de suficiente información como para aventurarme a explicar las causas del este comportamiento, aunque quiero pensar que nuestra industria está aguantando el tipo (y noticias como éstas son una excepción).