Leo en varios medios que emisarios del City llegan hoy a Barcelona para negociar el fichaje de Touré Yayá. Vaya por delante que estoy totalmente en contra de su marcha. El marfileño ha sido pieza indispensable para la consecución de todos los éxitos deportivos del Barça. Pivote defensivo de largo recorrido, excepcional en el posicionamiento, muy correcto en la distribución y superlativo en potencia, fuerza y caracter competitivo. Además defensivamente es un muro, su altura ayuda mucho al equipo a la hora de defender jugadas de estrategia. Quizá tiende a complicarse demasiado la vida en la salida con balón controlado, cosa que nos ha costado algún gol, aunque en líneas generales ha mejorado mucho desde su llegada en ese aspecto. Por último destaca por su gran llegada de segunda línea y su potente disparo, eso por no mencionar alguna que otra jugada de crack, como el primer gol ante el athlétic de Bilbao en la copa del rey del año pasado o la jugada del tercer gol ante el Valladolid, en el último partido de esta temporada.
Por todas estas razones, Yaya se ha convertido en una pieza codiciada para la mayoría de clubes importantes a nivel europeo. Bueno, por eso y porque su agente, se ha encargado de airear los deseos del africano de buscar nuevos destinos. Como el jugador no ha dicho esta boca es mia, debemos entender que está de acuerdo con el cambio de aires.
No obstante a mi sentido común le cuesta entender todo lo que rodea a este chico. Llegó como un semidesconocido, se convierte en el pivote defensivo titular del Barça, gana 7 títulos en dos años, se le renueva a finales de la temporada pasada, es por méritos propios, uno de los jugadores más queridos por la afición que siempre le despide cuando es sustituido con una cerrada ovación...así que uno se pregunta...¿Que más quieres tio?
Por los mentideros se especula con que el jugador no está satisfecho con los minutos que Guardiola le ha dado este año. Busquets también está en crecimiento futbolístico y es lógico que ambos jugadores alternen el puesto, en función del rival, estado de forma o decisión técnica, vamos, lo normal en cualquier equipo de élite. ¿Piensa Yaya que en el City, en el Manchester o en el Milan, no va a tener competencia? Me niego a pensar que sea tan simple.
A mi todo este asunto me huele a chamusquina. Lo que veo claro es un interés por parte del agente del chico, en sacar el máximo rédito de la carrera futbolística del centrocampista. Yayá está agusto en el Barça, cobra una pasta, es valorado y se sabe importante, el problema es que con eso, su agente, no se gana el pan. Su agente vive de las comisiones de los traspasos, que es donde se mueven las cifras jugosas. Espero que alguien le abra los ojos a Touré, ya sea su hermano, un amigo de verdad o quien sea. Que no olvide Yaya, que es el Barça el que le ha echo grande y no al revés. En un equipo como el azulgrana, es relativamente fácil destacar y hacerlo bien a poco que tengas calidad. Jugar al lado de Iniesta, Xavi, Piqué, Messi, Alves... te permite explotar al máximo tus virtudes y a la vez, enmascarar o camuflar tus defectos.
Llegados a este punto, si finalmente Touré se tiene que ir, que así sea, no hay nadie imprescindible. Eso sí, no a cualquier precio. El Barça no ha puesto al jugador en venta, es su agente quien lo hizo. La claúsula es de 100 millones y tiene contrato hasta 2012. Tal y como está el mercado y teninendo en cuenta que por Villa hemos pagado 40, que por Cesc nos piden 50 y que Xabi Alonso el año pasado costó 35, el Barça debería exigir un mínimo de 30 millones de euros. Si nadie pone esta cifra sobre la mesa, pues a seguir jugando como un profesional que es. No me preocupa su rendimiento posterior. El futbolista sabe que si no quiere ver devaluado su caché, debe seguir jugando a tope, como le sucediera a Alves el año anterior a su salida del Sevilla.
Si el City los pone y Touré se marcha, el relevo debe llegar de inmediato. En mi lista de prioridades, Mascherano, un pedazo de jugador defensivamente hablando; Con seguridad, el futbolista que más balones corta a lo largo de un partido. Las coberturas a los laterales y a los volantes son acojonantes. Un jugador todoterreno, temperamental, ganador y con mala leche, algo que la próxima temporada no nos puede faltar. Es un tipo de jugador que no tenemos y que para partidos como el de Milán este año, nos hubiera venido como anillo al dedo.