El basket español se muere

Hablare de baloncesto, pero cualquier deportista se vera identificado con lo que os contare.  Pocos se libran de las garras de las dificultades sembradas por las bases económicas en las cuales están asentadas la mayoría de ligas deportivas.  El fútbol por nombrar alguno, el deporte rey del país atraviesa una de sus grandes crisis debido a los contratos televisivos que proponen horarios que poco favorecen al ámbito deportivo.
Hace un par de días el baloncesto se convertía en el centro de atención, el USA-España logro convocar frente a los televisores a un 5,4 millones de espectadores de media y un share del 45%. A pesar de la vistosidad que logro desprender el partido, no se reflejo la situación real que atraviesa el basket español.
Tras la desaparición de la LEB Bronce, equipos de Leb Oro y Plata hacen malabares para pagar los avales de sus respectivas ligas. Ni hablar queda ya de EBA una liga totalmente destrozada por la supresión de las ayudas del estado y la falta de patrocinadores. Ante esto poco podemos hacer. Equipos como Estudiantes y CB Valladolid (equipos que ocuparon los puestos de descenso en la temporada 2011/2012) no descenderán debido a que los equipos merecedores del ascenso no tienen dinero para costear la clausula de la Liga Endesa.  ¿Dónde está el premio a una gran temporada? ¿Está por delante el poder económico o el poder deportivo? ¿Qué piensan de esto los chavales que se están formando en un deporte como este y descubren que el esfuerzo se puede ver anulado por los intereses económicos? ¿Dónde está ahora la época dorada del baloncesto español? 
Cada díacribe esto mientras se pone sus botas para ir a jugar una pachanga con los amigos. El ruido de la pelota botando es uno de los placeres de la vida.. No quiero que deje de botar. son equipos más grandes los que desaparecen. Me inquieté con la desaparición de un enorme equipo como el Ros Casares y me inquieto cuando suenan equipos de categorías modestas (que al fin y al cabo son los que forman a niños en grandes jugadores) como aspirantes a la desaparición. Está claro que el modelo deportivo español es un desastre y esto no os lo dice ningún periodista de fama, os lo dice un aficionado más que escribe esto mientras se pone sus botas para ir a jugar una pachanga con los amigos. El ruido de la pelota botando es uno de los placeres de la vida.. No quiero que deje de botar.