9ª Partida.- Miércoles 16 de Septiembre de 1992.
Un "acomplejado" Boris Spassky se sentó a jugar aquella partida y en plena teoría (enciclopédica) cometió un grave error en el decimoséptimo movimiento y la perdió de modo inmediato.
Tal vez, antes de empezarla, por su cabeza rondó la oportunidad que tuvo, desaprovechada por él mismo, de haber podido ganar la sexta partida del encuentro después de haber conseguido la victoria en las dos anteriores, algo que le hubiera posibilitado entonces endosarle a su mítico rival "tres ceros" seguidos.
Lo cierto es que las tornas se invirtieron y con esta nueva victoria, fue Bobby Fischer el que consiguió su tercer triunfo consecutivo.
En el momento del grave error de Spassky todavía había una partida de élite conocida en la época, la que disputaron en Bar, en el año 1980, el GM Biyiasas (2485) y el fuerte ajedrecista serbio Vukovic (2405).
Veamos lo que dijo en aquel momento al respecto la principal prensa española, cuyos recortes han salido de mi portentoso "baúl de los recuerdos":
Las partidas complementarias que pude encontrar entonces en la NICBASE 3:
"Estoy sonado", le transmitía Spassky a Leontxo García. Para este cronista, antes y ahora, los errores con esas edades, eran lo de menos. Lo bonito verdaderamente es que podíamos disfrutar del "genio" del que tanto habíamos oido hablar de niños. Luego, al respecto, me especialicé en "El Caso Fischer" al que llegué "casi" a conocer gracias a los libros (!?), pues yo creo que tengo el 95% de todos los libros sobre Bobby publicados en español y en inglés.
La primera versión de la novena partida, gracias a mi programa informático THE KING:
El GM Alfonso Romero destacaba los mejores conocimientos teóricos de Fischer en esta línea de juego. Justo antes de entrar en ella, Fischer tenía con la Variante del Cambio de la Apertura Española, el fabuloso "score" de ¡+7 =2!. De hecho, parece ser que ese sistema de apertura era el que le tenía preparado para jugarle con las piezas blancas, en 1975, a un tal Anatoli Kárpov (!?).
Contra la "edad" no se puede luchar. Hemos visto también a Kaspárov no ganando los torneos (a rápidas) cuando ha reaparecido:
La segunda versión:
El MI Javier Ochoa volvía "erre que erre" sobre el asunto, que carecía de trascendencia:
Queridos lectores, si un sólo día puede marcar la diferencia, ¡imagínense 20 años!. Eso mismo ya lo sabía en 1992, la mítica diosa Caissa:
Angel Jiménez [email protected]
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