Revista En Femenino
Las mujeres que comen frutos secos durante el embarazo, y que no son alérgicas a ellos, son menos propensas a tener hijos con alergias a los frutos secos, sugiere un estudio reciente.
El Dr. Michael Young, profesor clínico asociado de pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, y sus colaboradores, recolectaron datos sobre más de 8,200 hijos de madres que participaron en el Estudio de salud de las enfermeras II. Las mujeres habían reportado que comían antes, durante y después del embarazo.
Alrededor de 300 de los niños tenían alergias a los alimentos. De ellos, 140 eran alérgicos a los cacahuates y a las nueces de árbol.
Los investigadores hallaron que las madres que comían la mayor cantidad de cacahuates o nueces de árbol (cinco veces o más por semana) tenían el riesgo más bajo de que sus hijos contrajeran una alergia a esos frutos secos.
Pero los hijos de madres que eran alérgicas a los cacahuates o a las nueces del árbol no tuvieron un riesgo significativamente más bajo, halló el estudio.
El estudio aparece en la edición en línea del 23 de diciembre de la revista JAMA Pediatrics.
La tasa de niños estadounidenses alérgicos al cacahuate se triplicó y más, pasando del 0.4 por ciento en 1997 al 1.4 por ciento en 2010, según la información de respaldo incluida en el estudio. Muchos de los alérgicos al cacahuate también son alérgicos a las nueces de árbol, como los anacardos, las almendras y las nueces, apuntaron los investigadores.
"Las alergias a los alimentos se han hecho epidémicas", lamentó la Dra. Ruchi Gupta, profesora asociada de pediatría de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad de Northwestern.
"Nuestros propios estudios muestran que el 8 por ciento de los niños de EE. UU. tienen una alergia a un alimento. Esto equivale a uno de cada 13, unos dos por cada aula", señaló Gupta, autora de un editorial acompañante en la revista.
Pero el motivo de esta epidemia sigue siendo un misterio, dijo Gupta. "No tenemos evidencia sobre qué está provocando este aumento en las alergias a los alimentos", lamentó. "Se trata de algún tipo de vínculo genético y ambiental".
Los nuevos hallazgos no demuestran una relación causal entre el hecho de que las mujeres coman frutos secos durante el embarazo y un menor riesgo de alergia en sus hijos, señaló Young.
"Los resultados de nuestro estudio no son suficientemente potentes como para hacer recomendaciones a las mujeres embarazadas sobre la dieta", comentó.
Sin embargo, Young dijo que los hallazgos amplían la creciente evidencia de que la introducción temprana a los alimentos aumenta el desarrollo de la tolerancia y reduce el riesgo de alergias.
"Nuestros datos deben asegurar a las mujeres embarazadas que pueden comer frutos secos sin hacer que sus hijos sean alérgicos a ellos", enfatizó.
Gupta se mostró de acuerdo. "Con el aumento reciente de las alergias a los alimentos, creo que las madres temen que comer ciertos alimentos podría hacer que sus hijos contraigan una alergia a un alimento", planteó. Pero los datos no respaldan esa idea, anotó.
"Las madres no deben temer comer ciertos alimentos, y deben satisfacer sus antojos y dietas regulares, y no evitar las cosas para intentar proteger a sus hijos de la alergias", comentó.
Este estudio sugiere que la exposición a los frutos secos muy temprano en la vida podría proteger a los niños de contraer alergias a ellos, una teoría que también se ha vinculado a otros alimentos a los que los niños son comúnmente alérgicos, dijo Gupta. "El problema es que no contamos con suficiente datos firmes para recomendarlo", dijo.
Los ocho alimentos a los que los niños son alérgicos más comúnmente son los cacahuates, la leche, los huevos, las nueces de árbol, los mariscos, el pescado, el trigo y la soya, enumeró Gupta. Con frecuencia, los niños superan esas alergias al crecer, comentó.
"Las que se superan más comúnmente al crecer son las alergias a los huevos y a la leche", señaló. "En cuanto a cosas como los frutos secos y el marisco, apenas entre el 10 y el 20 por ciento [de las personas] superan esas alergias".
El dramático aumento en las alergias a los alimentos no es un fenómeno exclusivamente estadounidense, sino que se observa en todo el mundo, comentó Gupta. "Definitivamente vemos unas tasas más altas en Canadá, Europa, Japón, China, India, en todo el mundo", aseguró.
Gupta dijo que espera que durante la próxima década se descubra el motivo de este aumento en las alergias a los alimentos, y qué se puede hacer al respecto.
HealthDay
Via
MedlinePlus