“El beso de Judas”

Una tarde lluviosa de un día como cualquier otro, rodeado de lo continuo y aburrido, seguía viviendo mi día a día, albergándome en un centro comercial de la ciudad me tropecé con un amigo de años atrás cuando estudiaba en la Universidad lo acompañaba una linda joven, no podía evitar mirarla de cuando en vez mientras me saludaba con mi amigo y pensaba quien era esta joven tan bonita...mi mente indagaba y se preguntaba muchas preguntas, al final me la presento estreche su mano y era solo una compañera de su trabajo y al despedirnos me fui pensando en ella. A los días y ya de olvidar a ese bello rostro, lo mecánico que se hace la vida en trabajar para seguir viviendo los problemas que acarreó mi divorcio el extrañar a mis dos hijos, de no verlos continuamente, la soledad, el stress que produce no compartir tus sabanas con la mujer imaginaria de mis noches oscuras, cual es mi sorpresa que recibo una llamada a mi celular el cual respondí y con voz de ángel me respondió hola es Daniela !.. disculpa la amiga de Gerardo nos conocimos en el Mall yo te llamo por una propuesta!... mis pensamientos volaron y como un niño ingenuo pensó tanto, acepte y nos reunimos. Después de nuestro primer encuentro seguimos comunicándonos y una tarde nos topamos de la mano, que feliz fue ese día, nos dimos el primer beso, beso que todavía recuerdo, esos que son puros, que te llegan al alma y mas allá, un beso de alquilen que te hace temblar por dentro, te hace llegar al cielo, sus ojos, su cabello, su boca, su cara blanca delicada, sus manos de porcelana, atrás se quedaban las noches solitarias, de verme al espejo solo y decirme que desdichado soy, hoy nuevamente conocí el amor, volví a amar a Dios. Los meses pasaron todo seguía de mas en más era una necesidad vernos a diario, llamarnos y de compartir nuestras cosas como las más intimas, reíamos y creía que conocía todo de ella!!!. Como otra tarde cualquiera de un día normal y corriente cuando crees que el cielo te sonríe en el fervor del trafico del medio día veo a mi querido amor montarse en un auto... y algo me dijo que la siguiera casi ya decidiendo doblar en la esquina para continuar mi camino, a las pocas cuadras se bajan en un sitio elegante y se baja un joven apuesto presuroso a abrirle la puerta... Me dije no es nada de seguro no puede haber nada diferente, se baja Daniela y se toman de las manos entran al Restaurant y yo los sigo desde lejos, al mirar a distancia vi sus ojos brillar su sonrisa cálida con ese sujeto igual al de nuestra primera salida, me acerque y pense del beso de ayer y de su voz que me decir "te amo mi amor", para que seguir narrando...!. Cuantos besos hemos recibidos pensando que son reales, verdaderos o falsos, no hay receta, no hay un laboratorio interno que te ayude a descubrir lo irreal de un hecho que nos llena y nos parece genuino, es amor es tan débil como la lebra de un cabello. Un beso de Judas .... Un beso traidor.