Sofía Sutcliff, una chica de casi 17 años atraviesa un momento muy difícil. Su madre está muriendo lentamente. El cáncer acaba con su existencia y a Sofía le parece tan equívoco, tan injusto... Su padre no le dirige la palabra, si acaso se comunican a través de notas dejadas sobre el refrigerador. Su mejor amiga, Lorraine, es su único apoyo, pero parece ser que ella también está por abandonarla. Todo resulta devastador para la adolescente. Desea hablar de la muerte, pero nadie se atreve a hacerlo, hasta que conoce a Simón, un joven cuya presencia evoca la belleza e incomprensión que resulta ser la muerte.
Pero Simón también tiene sus propios problemas: alguien quiere deshacerse de él. Sofía se sorprende cuando lo descubre con la cara bañada en sangre. ¿Está loco o de verdad es un vampiro de 300 años como afirma ser?
Corazón plateado:
Sofía está sufriendo una gran pena en su vida: su mamá, una pintora dulce y alegre está muriendo de cáncer y permanece largas temporadas en el hospital. No es justo que alguien como ella se tenga que ir tan pronto y la deje sola siendo tan joven. Su padre está cada vez más apático con ella, apenas si se ven en el día, no la deja ver a su mamá muy seguido y sólo le deja notas diciéndole que no vendrá y ella pasará la noche sola en casa. Su única amiga se rehúsa a tratar el tema de la muerte de su mamá y Sofía solo se conforma asintiendo y se pasa los días escribiendo poesía, caminando por el parque de su ciudad y tratando de lidiar con el dolor. En uno de sus paseos, se encuentra a un joven bellísimo (como no) y muy pálido, que por su ropa negra y chaqueta de cuero no parece de fiar. A pesar de todos sus problemas, este chico parece comprenderla a la perfección y es su apoyo en los momentos duros por los que está pasando...
¿Más de lo mismo? No
Muchos podrían pensar que este libro es el típico de Chica tímida + Chico vampiro + Drama = Novela Juvenil Fantástica. Pero hay que tener en cuenta que este libro es de 1992, cuando este boom literario juvenil no había asomado su nariz por las librerías. No es de una chica sosa en apuros que sabe que es una antisocial ni un vampiro con mirada sueltaquijadas y que sería perfecto para un anuncio de Axe... nada de eso. Es un libro muy corto, ¡Autoconclusivo! que se lee en un suspiro, pero que deja un sabor de boca bastante agradable. Primero que todo, la narración es muy simple y fluida. Los capítulos están alternados desde la perspectiva de Sofía y el chico que se llama Simón (yo preferiría decirle Saímon, suena más bonito) así que se profundiza en los dos y se hace más interesante la trama.
Los personajes son el punto más agradable del libro: Sofía no es la típica reina del drama que como su madre muere lentamente, no es popular, está muy sola y que se pasa medio libro lamentándose y todos esos tópicos literarios que tanto abundan por ahí. Es una joven que está sufriendo, que se toma lo de su madre con resignación y se siente sola y desprotegida, no se me hizo nada pesada y la comprendí tanto que sentí pena por ella (lagrimilla por ahí). Y Simón (Saímon), sí es un vampiro, pero es muy especial. Tiene más de 300 años, y eso le da un aplomo y un encanto que pocos vampiros literarios tienen, en pocas palabras: mi vampiro favorito ♥ El libro es melancólico, donde se tratan temas como la muerte, la soledad y lo duro que es dejar ir a alguien.
En cuanto al romance, es tan sutil y bonito que es para suspirar sin morir de empalagosería, aunque se me hizo algo repentino. Los dos chicos sufren y tienen problemas, se ayudan mutuamente y eso hace que su relación sea más mágica y más realista. Y la pregunta es: ¿hay misterio o acción? Claro que lo hay. Algo que me gustó mucho fue cuando Simón le cuenta su historia y también de cómo se convirtió en vampiro, vamos, muy bien ambientada en la vieja Inglaterra y muy original. Hay acción, muy bien descrita porque hay alguien que está haciendo maldades por ahí y Simón tiene que encargarse de él. Hay que mencionar que los vampiros son los clásicos que se queman con el sol, beben sangre,
Pueden verse similitudes con crepúsculo, pero es más bien que el libro de Meyer le tomó cosas a este, dada su anterioridad. Hay varias cosas parecidas que no diré para no spoilear a nadie, será mejor descubrirlas si lo lees. Para concluir, es un libro melancólico, triste y nada empalagoso que me hizo adorar (de nuevo) a las historias de amor vampiricas, pero sin obsesiones ni tópicos.
Titulo: El beso de plata
Titulo Original: The Silver Kiss
Autor: Annette Curtis Klause
Editorial: Norma
Año: 1992
ISBN: 9789580456346
Tal vez no me vea mucho por aquí, último mes de semestre a la vista...