Cuando aprendemos a dar lo mejor de nosotros mismos a nuestra sociedad sin pretender algo a cambio es cuándo podremos hallar la dicha de ser felices, pues si pretendemos que teniendo de forma egoísta algo que nos da felicidad y amor lograremos aumentar dichas virtudes estamos muy equivocados pues así como el amor y la felicidad aumentan cuando se comparten disminuyen cuando se tiene de forma egoísta hasta el punto desaparecer, el amor y la felicidad cuando se reprimen y se esconden como mercancía mueren, pues estos para subsistir deben ser libres, es por esto que es vital aprender a compartir.

