El post de hoy va dedicado especialmente a todos aquellos que me siguen habitualmente, y que están preocupados porque llevo varios días sin escribir un nuevo post.
¡Tranquilidad! Todo va bien, o mal (según se mire). Físicamente no me ocurre nada, porque con los años, cada vez más, uno ya se ha acostumbrado a contemplarse como “arte alternativo”, en lugar de aquel “feo” con el que normalmente me catalogaban en la juventud. Ya se sabe, todo es cuestión de saber promocionarse, y no "venderse", porque, eso, ni metafóricamente...
El problema de no escribir ningún post estos días, es que uno se conoce, y tampoco es cuestión de escribir pesimismo sobre pesimismo, o negro sobre negro, porque inmediatamente sería candidato a una camisa de fuerza y el tirar las llaves, como en la canción infantil, “en el fondo del mar, matarile, rile, rile”, para que nadie me pueda rescatar.Y es que el entorno, teniendo en cuenta al mundo como aldea global, tampoco es como para tirar cohetes, aunque teniendo en cuenta al nuevo presi de los americanos, los cohetes de los pueblos se podrían convertir en misiles, ya se sabe, los americanos y sus superproducciones: todo a lo grande…
Y es que, con el panorama actual, a uno le salen mil y un chistes, pero todos con carga explosiva dentro.
Mujeres adineradas que confían fielmente en sus maridos, y que incluso acompañándolos regularmente a Suiza, ni por un momento se plantean lo que sus maridos pueden estar haciendo. Y es aunque les acompañaban a cualquier sitio, no sabían que aquellos edificios eran bancos, porque no son “como los de aquí”.¡Qué suerte tienen algunos! Porque La Nuri, mi sufrida, aunque no es celosa, sabe que si huelo a tabaco, como sabe que no fumo, deduce que en el peor de los casos, alguna pelandusca ha podido estar cerca... Y no hablemos de dinero..., porque solo con mirarme, puede decir, euro arriba, o abajo, lo que me he gastado o ahorrado en las últimas veinticuatro horas. Y estoy seguro de que la mayoría de mis lectores, en este caso, masculinos, opinarán lo mismo. Porque para cuando nosotros, vamos, ellas ya han estado allí. Y eso no es ni machismo, ni feminismo, sino realidad de la buena.Miles de mujeres luchando día a día por la igualdad de géneros, y “algunas”, lo echan a perderen una hora, o lo que viene siendo el declarar ante el juez, presuntamente, por poder seguir disfrutando su nivel de vida fuera de la cárcel…Con respecto a las denominadas “redes sociales”, tweets llenos de odio dirigidos a la memoria de una fallecida famosa, y que compruebas que por venir presuntamente de derechas esos mensajes, se tarda mucho más, parece ser, en tomar cartas en el asunto por parte de la fiscalía.El odio no debería de tener diferencias por origen o destino, porque el odio no se debe disfrazar de niveles de baja o alta intensidad. Lo que es terrible y horrible en sí mismo no se debe de medir, sino directamente aislarlo. Y aquí no se debe de mencionar el fantasma de la “censura”, porque el humor negro es otra cosa.
Ya se puede percibir, por todo lo anterior, que ni las musas se quieren acercar a este vecino del mundo, Y eso, sin hablar todavía del “amigo americano”, desde hace poco con la cara, o cruz, de Mr. Trump. Analizándolo, a él, a sus pensamientos, y a sus confesadas aspiraciones, viene a ser como un “túnel del tiempo” pero con el que solo puedes ir marcha atrás, y retrotraerse a épocas de “caza de brujas”. Y a uno le da mucho, mucho miedo…Y como siempre ha considerado, este vecino del mundo, a “este blog como una atalaya desde donde se ve, y se es visto”, estos últimos días se ha obsesionado con que su blog es una casa de cristal, por aquello de ver y ser visto, pero que está colgando de un acantilado. Con el agravante, además, de que este vecino del mundo tiene miedo a las alturas y, lo que es peor, al hombre en sí mismo, y a que el constructor del susodicho “nido de cristal”, aunque sólo sea mental, haya podido “distraer” unos cuantos “dineros” de la construcción, ya que visto lo visto, en este país parece ser lo habitual.
Lo dicho, miedo, mucho miedo, en un mundo de lobos…, de dos patas, que son los peores.*FOTO: DE LA RED