Revista Comunicación
Añoro los tiempos en los que Coca-Cola sacaba alguna curiosidad, que generalmente era de muy buena calidad. Se canjeaban con algunas chapitas y algo de dinero y normalmente los artículos estaban disponibles en la tienda de la esquina. Incluso había veces en que te permitían canjear sin chapitas y solo con el dinero jajaja... Uno de mis favoritos fue el cajón de botellas de Coca-Cola en todos los idiomas, en miniatura por supuesto. Y eran tan bonitos que no calificaban como juguetes, sino como adorno. En este post, recuérdalos y comparte tu nostalgia.