Andrea Vilaró y Georgina Bahí. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.
—¡Hola!
El tono enérgico y seguro de su saludo y la mirada, directa a los ojos, me confirmaron la impresión que había tenido durante el partido sobre Andrea Vilaró (Barcelona, 1993). La alero de 17 17 años desprendía liderazgo y ambición incluso en los días nefastos. Quizás todavía más cuando las cosas no salían bien. Su Segle XXI, con Irene Garí, Yaiza Lázaro, Laura Aliaga o Itziar Llobet, había perdido en casa por 36-59 ante el CB Conquero. Vilaró llevaba una mochila física y otra mental en el pasillo del pabellón. Se notaba que le comían los nervios por haber metido sólo un tiro de sus nueve tiros y que se moría de ganas de empezar otro partido. Transparente hasta el infinito. Creíble.
Casi nueve años han pasado de esa anécdota, muy descriptiva de quién es Andrea Vilaró Aragonés, que cerró su séptima temporada en Liga Femenina, la cuarta en el Cadí La Seu, en un Palau repleto y en semifinales ante el Uni Girona (73-74). Con 6,7 segundos por jugarse, a Andrea Vilaró no le tembló el pulso para anotar dos tiros libres (73-74), tras una antideportiva extraña señalada a Núria Martínez. En otra acción peculiar, esta vez pitada a Laia Palau, Yurena Díaz tuvo en sus manos la prórroga o la victoria, pero falló los tiros libres. "Sé que aquí nunca en la vida me lo van a recrimir, pero, bueno, yo quiero pedir perdón por fallarlos, evidentemente. Ha sido muy duro acabar así en casa", le confesó Yurena Díaz a Xevi Bardolet en Esport 3. "Necesito descansar", se sinceró, en el mismo canal y ante el mismo periodista, Andrea Vilaró. Quienes la conocen bien, saben que el paréntesis será mínimo. Medio suspiro. "Es una trabajadora incansable y tenaz. Cuando acaba la temporada ya está pensando en cómo mejorar aspectos de su juego y su condición física. Es una jugadora que multiplica", interviene Montse Gallegos, su preparadora física en los meses sin competición ni pretemporada desde que la alero barcelonesa se marchó del Al-Qázeres y firmó por el Cadí La Seu. Andrea Vilaró es una jugadora de club que se ha mimetizado con el Cadí La Seu, la ciudad y la afición. Su puño o la silueta de su cara merecerían aparecer en el escudo porque Andrea Vilaró es un escudo para el Cadí La Seu. Lo mismo se deja el alma en la pista que coge un micrófono y agradece su apoyo a la grada, a sus compañeras, al cuerpo técnico, a los patrocinadores... Y hasta hace de comercial para tratar de atraer a más marcas que apuesten por el club, que jugará la Eurocup tras la mejor temporada de su historia: semifinalista de su primera Copa de la Reina, tercer puesto en la Liga Día y sólo dos derrotas en casa. Justo ante los finalistas. Superviviente y hambriento por naturaleza, el Cadí La Seu despidió el curso siendo el Cadí La Seu. Cinco puntos consecutivos de Andrea Vilaró y un triple de Ariadna Pujol completaron un parcial de 17-0 a favor de un Cadí La Seu aguerrido y divertido (24-14 a los 11m 18s) que dejó 6m 4s sin anotar a un Uni Girona impotente. Las visitantes se recuperaron gracias a la solidez de Gabby Williams y a la contundencia de su último refuerzo, Vionise Pierre-Louise. Entre Laia Palau, Julia Reisingerova y, sobre todo, Keisha Hampton igualaron y le dieron la vuelta al partido (45-48 a los 24m 30s). De nuevo, mordió el Cadí La Seu con Irati Etxarri, una de las mejores jugadoras en defensa de la Liga Día, puntos de todo tipo de Yurena Díaz o un tapón de Andrea Vilaró (67-60 a 6m 22s). Réplicas de Hampton y Pierre-Louis, reivindicación de Helena Oma, que rinde cuando juega... A 10'5 segundos Laia Palau metió a una mano el 71-74. Quedaron tiempo para cuatro tiros libres más, de los que entraron dos. Los de Andrea Vilaró. El Uni Girona se clasificó para su quinta final de la Liga Día, de nuevo ante el Perfumerías Avenida, vencedor en la Fonteta ante el Valencia Basket por 54-74.
Carácter. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.
"Andrea Vilaró es el reflejo de este equipo: garra, nervio, seriedad y trabajo", resume Cesc Mas. Puede que el Cadí La Seu haya practicado el juego más alegre, descarado y coral esta temporada en Liga Día y, sin duda, Bernat Canut ha sido el entrenador que más partido ha sacado a su plantel. Todas se sienten importantes, independientemente de lo que jueguen. "Sé que Bernat confía mucho en mí y, al final, tengo la suerte de que casi siempre que hay partidos ajustados estoy en la pista. Me da un poco de vía libre para jugarme la última pelota", le confesaba Andrea Vilaró a Cronómetro de Récords la temporada pasada tras una victoria en el Marina Besòs ante el Bàsquet Femení Sant Adrià. Ese día pidió que la foto de la entrevista fuese con un cartel de apoyo a Mireia Vila: "Somriurem quan tot falli. Seguim. Mire, t'estimem" [sonreiremos cuando todo falle. Seguimos. Mire, te queremos]. La alero catalana es generosa con sus compañeras, pero también con las rivales. Además, sabe, por fortuna, qué es superar una grave lesión: se rompió los ligamentos cruzados. Fichó lesionada por el Cadí La Seu. "Cuando me rompí, caí en un pozo. Creo que fue la peor época de mi vida, por muchas cosas, tanto personales como del baloncesto. Perdí 10 kilos", le confesó a Cronómetro de Récords Andrea Vilaró en la Copa de la Reina de Vitoria. El percance le hizo darse cuenta de qué es importante en la vida y de sus preferencias. También le ayudó a conocerse mejor. "Descubrí que mentalmente era muy débil y que me tenía que hacer fuerte si quería llegar a algún sitio". Ahora su fortaleza mental es una de sus virtudes más visibles. Probablemente sea la jugadora que más haya crecido en confianza en la Liga y no es sólo que juegue, rebotee, asista y anote más que nunca en el torneo. Es su liderazgo y temple. En GAS, el grupo de animación del Cadí La Seu, la retratan con dos palabras: corazón y talento. El perfil es exhaustivo: "Un talento que se demuestra en cada acción. Una jugadora capaz de coger la pelota en los momentos calientes y de jugarse los tiros decisivos. Este año ha destacado muchísimo en la faceta anotadora, sobre todo con penetraciones y mejorando con creces el tiro tras bote y el acierto con los triples. Además, su visión de juego es espectacular, así como su capacidad defensiva. ¿Por qué corazón? Corazón por su capacidad de esfuerzo y entrega sobre la pista, porque es capaz de levantarse después de un error y, sobre todo, por la capacidad de conectar con la grada y con toda una ciudad".
Andrea Vilaró en la Copa de la Reina. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.
"Para mí es, sin duda, la jugadora revelación de la temporada. Qué buenos minutos de baloncesto nos ha dejado qué bonito es verla jugar y disfrutar de esa manera. Siempre tengo a Andrea Vilaró en mi equipo de la Cyber Liga Femenina", confiesa la presidenta del club de fans de Silvia Domínguez (Fans Silvia Domínguez 6 en Twitter). Norberto de la Mata, jefe de prensa del CB Bembibre, tiene su propia versión: "Vilaró es la jugadora con mayor progresión-evolución del curso. Para mí la jugadora revelación es Julia Gladkova". "Trabajo y constancia son su esfuerzo diario; la valentía en los momentos complicados, su ADN; su talento es la acumulación de muchos años de esfuerzo cada día; es y será siempre una persona noble y honesta con el grupo. En este último punto, su espejo es Noemí Jordana. Orgullo de visión", aporta José M. Breva. "Gracias por estar aquel día en el Pare Manyanet y darme la oportunidad", le agradece la propia Vilaró. "El carácter de Andrea Vilaró contagia en positivo. Éste ha sido su curso de máxima explosión, pero es el fruto de muchos años de trabajo", advierte Montse Gallegos, su preparadora física fuera de temporada: "Me consta por cómo se lo ha currado conmigo, sus entrenadores, nutricionistas...". "Andrea es muy fea", escribe su excompañera y amiga Tania Pérez. Se suelen repartir adjetivos grises, pero se quieren mucho. "Feos son los rotos que ha ido haciendo esta temporada", corrige Josemari Sierra.Andrea Vilaró no quiso confirmar ni desmentir si seguirá o no en el Cadí La Seu. Sólo dejó claro que de una manera o de otra estará presente en el club y que ni ella ni sus compañeras se olvidarán jamás de una temporada de ensueño. "Pase lo que pase, queremos que el pabellón esté lleno cada sábado", deseó en voz alta. Enlaces relacionados "Yurena Díaz es parte esencial en mi vida e Irati Etxarri tiene un crecimiento imparable"
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