Revista Diario

El caso de la doble personalidad

Por Gatadormida

El caso de la doble personalidad

“Tú eres bipolar nene…”

Todos somos de una forma de ser o de otra, aunque es verdad que todos actuamos de una manera distinta dependiendo de la persona con la que estemos hablando. No hablo de “hipocresía”, sino que a veces eres mas diplomático, tienes mas confianza o menos… Pero siempre, en cualquiera de los casos, actuamos como somos realmente. Es lo que hay, no existe más. Otra cosa bien diferente es que te encuentres con un individuo o dos que es todo sonrisas pero cuando no se sale con la suya, parece que te va a dar la paliza de su vida o directamente te empieza a chillar como si fueras lo último del planeta. En ese caso, amigos míos, hablamos de otra cosa bien distinta… La doble personalidad.

Hace unos meses conocí a una persona, coincidíamos la mayoría de los días y dado que era “novato” y era simpático, agradable y parecía buena persona, congeniamos casi de inmediato. Su vida era todo un dilema, llegué a admirarle por algunas de sus decisiones y le apoyé en el momento en que decidió ampliar vistas a su actual vida. Pero de repente un día, simplemente porque pensábamos de manera distinta, esa sonrisa e imagen de “bondad” se transformó en todo lo contrario. Lo peor de todo es que cuando le comenté que no se enfadara por ello, al fin de cuentas todos tenemos diferentes puntos de vistas, se enfadó aún más siempre comentando lo buena persona y la imagen fantástica que tenía entre los compañeros anteriores, por lo que jamás… Tuvo ningún rifi rafe. La cosa se quedó así, pero no contentos con eso, se volvió a repetir hace unos días. Porque soy diplomática y se estar en cada momento, pero estuve a esto de decirle directamente que a mi nadie me levanta la voz y menos él, que ha sido el último en incorporarse y que además no trabaja bien en lo que debe.

En teoría ya me dijo hace tiempo que para él era “una muy buena amiga”, pero francamente a los amigos no se les trata así… Por mi parte me alegro por el giro que ha dado su vida, la verdad es que le deseo lo mejor, eso si, siempre lejos de mí. Sobra contar que el trato ahora mismo es cero en todos los sentidos, porque las personas con doble personalidad… Que se queden lejos de mi y de mi vida, y que le vaya bonito como aquel que dice.


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