"El chico del violín" de Raquel Cruz

Shirley está deprimida porque su novio de toda la vida la ha dejado y no acaba de asumirlo. Su amiga Karen, harta de aguantar sus lloriqueos, insiste en que salga con ella y por una noche se olvide del paquete de Kleenex. Shirley accede sin imaginar hasta qué punto esa decisión cambiará su rumbo.

John Clayton estudia en la Juilliard School, la escuela de música más prestigiosa del mundo. Trabaja como camarero en el McGee's y toca el violín en un grupo de rock. Vive marcado por un trágico suceso, pero disfruta de una vida apacible en New York. Hasta que una noche sube al escenario y tropieza con unos bonitos ojos que parecen tocar su alma.

Por encima de todo Shirley y John comparten algo que los une: su amor por la música. Pero a veces las personas que supuestamente están más cerca de ti, son las que menos te comprenden, y ambos tendrán que vencer infinidad de obstáculos para lograr que sus sueños se hagan realidad.

Editorial: Autopublicado Amazon.

Encuadernación: Tapa Blanda / Ebook

ISBN: 9781544929613
Año de edición: 2017

He tenido la suerte de poder seguir la trayectoria de Raquel desde el principio. Los lectores que hayan tenido la oportunidad de hacerlo alguna vez sabrán que nunca lo ha hecho mal, pero también comprobarán que el cambio de estilo y que los años han hecho que su estilo se depure más si cabe. Autoras como ellas demuestran que si se quiere se puede, pero que para ello hay que tener tesón. Nunca duda en esperar, pedir ayuda y corregir mil veces el manuscrito. Es lo que debería hacer todo el mundo, pero que pocos autores por las prisas hacen. Y... ¿para qué sirve eso? Para tener una novela como "El chico del violín".

Nunca entro en el tipo de novela porque bueno eso es muy particular de cada uno. Es verdad que a quien no le guste el género le da igual si yo digo que es buena o mala. Pero los que me leéis sabréis que siempre me fijo más en la calidad que en el género porque no siempre me toca leer lo que a mí me gusta y si pusiera un malo por el género no sería ético para con el autor. En este caso encima es una temática que me gusta. Se trata de una novela "young adult", con un hilo conductor coherente, progresivo. Relata principalmente la vida de Shriley y de John; dos jóvenes en principio muy dispares entre sí pero que por la música (entre otros menesteres) verán como tienen muchas más cosas en común de las que creen. Obviamente el amor es lo que parece que prima en la narración, pero no se queda únicamente ahí. Los lectores podrán comprobar que ambos tienen que lidiar con temas importantes en sus casas. No penséis en maltratos o pasados oscuros; en el fondo eso está muy visto. Raquel, por lo general pone todo más natural, más cotidiano (incluso cuando lo fantástico entre en sus novelas) y es la dicotomía entre seguir los propios sueños y aspiraciones; pensar en el futuro de uno mismo, o bien realizar lo que quieren nuestros padres. Un tema que a priori puede parecer muy fácil, pero en el fondo da más de un quebradero de cabeza a quien lo sufre, y seguro que más de un estudiante al leerlo se sentirá idenfificado.

En cuanto a los personajes decir que son reales, con sus emociones a flor de piel, sus anhelos, sus odios y frustraciones. Con una evolución que se ve, se palpa y no sólo por el paso del tiempo, que en la novela veremos unos cuantos años. Los diálogos en ocasiones son serios demostrando que los jóvenes no sólo tienen pájaros y sexo en la cabeza pero no olvidemos el humor característico de la autora con frases puestas en su momento oportuno. Pone siempre como protagonista a una chica pizpireta que tiene miedos como cualquier mortal que se precie pero que al final los vence. Pero si los protagonistas tienen un gran peso no serían nada sin los secundarios, que llevan un buen peso de la historia, pero incluso los antagonistas están también bien descritos.

En esta ocasión la historia está regada de buenas dosis de música y en especial de música clásica fusionada con otros estilos, dónde los jóvenes pueden descubrir que el violín no tiene por qué ser aburrido.

Su historia está contada de una forma cercana, muy visual, por lo que simplemente al llevar pocas páginas ya hemos visualizado tantos los lugares como los personajes y lo más importante: hemos conectado con ellos. Por lo que por una parte deseas avanzar rápido para terminar y por otra deseas recrearte para que no termine. Y que pase esto no es fácil, muchos autores tienen historias muy profundas, muy bien escritas, con premios, pero en relación a los personajes los escriben de forma más plana. Y es lo que digo, no es una descripción, evolucionan por su forma de relacionarse entre ellos, con su entorno y por medio de los diálogos.

Deseando que hubiera continuación y no la hay.