Es curioso que cada vez encontramos más similitudes etológicas entre cualquiera de las dos especies de chimpancés con la nuestra. La última: la perversión y guarrería que puede llegar a realizar un ejemplar de Pan troglodytes.
Claramente aquí no hay amor, cosa totalmente diferente a lo que ocurre con los simpáticos, y viciosos, bonobos (Pan paniscus). Una sociedad muy curiosa la de estos primates. Todas las disputas sociales dentro del grupo se saldan con un rápido affair, ya sea entre miembros del mismo sexo o de distintos. Parece ser que la única limitación es que no halla relaciones entre progenitores e hijos.
Junto con los humanos los bonobos son los únicos animales que practican la llamada postura del misionero.
Volviendo al tema del vídeo que ha iniciado esta insulsa entrada, lo más seguro es que ese chimpancé halla visto un comportamiento similar y lo esté imitando. Por cierto, afortunadamente para el desgraciado anuro los genitales de los primates son, con respecto al tamaño corporal total, pequeños.
P.D.: Gracias a Mammal-chicho por pasarme el enlace ;P