Día triste para la prensa diaria española: EL diario PÚBLICO ha anunciado el cierre de su edición en papel. Un centenar largo de periodistas y empleados del diario se quedarán sin trabajo en los momentos en que los medios de comunicación escritos viven la peor crisis de la historia que yo he conocido.
Nadie ocupará el espacio que deja PÚBLICO, es ese mi parecer. No habrá trasvase de lectores sustancial a otras cabeceras. El hueco que llenó, con su nacimiento, en el centro izquierda más joven y algo cansado de las voces de los diarios establecidos, no encontrará en estos momentos cauce de expresión suficiente.
El esfuerzo económico y periodístico ha sido importante. El desgaste de los últimos meses con el intento de aguantar el chaparrón de la crisis, también.
Roures y Tatxo, al parecer, son los dos últimos millonarios de izquierdas puesto que no han conseguido arrastrar inversores afines para la causa.
Y es que debe ser muy complejo en este país encontrar quienes hoy en día quieran hacer apuestas por el papel. Los propios editores son los primeros que lanzan a los cuatro vientos que los periódicos tienen los días contados y con esos planteamientos solo se consigue alimentar la desconfianza en un sector que se está transformando a golpe de ERE y de cierres.
Es cierto que no se han alcanzado en PÚBLICO los objetivos de ventas de ejemplares suficientes para mantenerlo a flote y que la crisis publicitaria castiga a todos, y sobre todo a los más débiles. Pero también debe haber influido para tirar la toalla el que el proyecto mediático de Roures en la Sexta, a través de Mediapro, se haya diluido en brazos del grupo de Antena 3.
El panorama que vivimos en los medios apunta hacia la concentración de estos. Una concentración en la que dos más dos sumará tres cómo máximo, con ello quiero decir que los grupos se encogerán, soltarán lastre tras las fusiones y menguarán las cabeceras y los programas en favor de la eficiencia financiera.
Antes se decía que los mercados los pondrán en sus sitio y nos referíamos al mercado de lectores, telespectadores , oyentes y anunciantes...hoy los mercados que harán imperar su ley son los financieros.
Estos no entienden que somos mucho más pobres, en todos los sentidos, con el cierre de PÚBLICO.